Esta, la de la Costa da Morte, es una tierra donde la gente ha tirado cuanto tenía que tirar, incluso con el viento soplando en contra (o muy en contra). Lo sigue haciendo, buscándose las castañas. Es tierra de emprendedores, una virtud que ayer ensalzó el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, durante su visita a la conservera Calvo, en Carballo, para asistir a la presentación del plan Calvo Excellence System. Feijoo se deshizo en halagos al carácter innovador del grupo y al referente que es a nivel mundial para un sector tan importante en Galicia, llevando el nombre de Carballo a más de 70 países. Cuestiones que, por cierto, ya se habían reseñado con ahínco durante la celebración del 75.º aniversario de la conservera y durante la concesión de la Medalla de Ouro por parte del Concello. Ambos momentos históricos los recordó el martes en el acto comarcal del BNG el regidor, Evencio Ferrero, crítico con el hecho de que el máximo responsable autonómico no estuviese presente en ninguna de esas efemérides, pero sí un acto de días previos a las elecciones, por más que lo hiciese como presidente de la Xunta. Dijo Feijoo que Calvo es uno de esos motivos por los que sentirse orgulloso de Galicia. Emprendimiento, vanguardia, internacionalización. Hace hoy una semana, el candidato a la Xunta por el PSOE, Xoaquín Fernández Leiceaga, también visitó la conservera carballesa, donde en su caso incidió en la necesidad de «mellorar a innovación en todas as fases do proceso produtivo». Propuso, así, un plan de apoyo al empleo juvenil, para crear cada año 10.000 puestos de trabajo. «Apoiaremos ás empresas para mellorar a súa calidade e os seus procesos de internacionalización, reforzando ademais a innovación en todas as fases do proceso produtivo», reseñó. El mismo mantra de la internacionalización y la innovación fue aludido por el conselleiro de Industria, Francisco Conde, hace tan solo unos días, destacando ambos conceptos durante su reunión con el Clúster da Madeira e do Deseño, que preside Manuel Iglesias, de Galopín. Hoy, Conde acudirá a Carballo, junto con el candidato Aurelio Núñez, para mantener una reunión con empresarios. Tenga o no que ver esta profusión de visitas con las proximidad del 25-S o con la mucha implicación social que tienen los empresarios y las asociaciones que los aglutinan, no cabe más que esperar que todo aquello que se le traslade a los integrantes de las listas -o lo que estos prometan- llegue algún día a puerto. La Costa da Morte seguirá gestando emprendedores, que seguirán remando para salir a flote, saliendo al mar para traer pescado a casa, pero ello, obviamente, es mucho más fácil con el viento a favor. A ver si sopla.