Carballo rodó al ritmo de centenares de personas en la fiesta de la bicicleta

Xosé Ameixeiras
A. Lavandeira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Familias enteras se sumaron a una celebración que duró tres horas

06 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Carballo vivió ayer una fiesta al ritmo de la muiñeira y la bicicleta y con el sabor las tapas. El Día da Bicicleta, y ya van 21, fue uno de los más concurridos. Un pelotón kilométrico recorrió con parsimonia tres parroquias, Carballo, Berdillo y Bértoa. Centenares de personas, familias enteras, aficionados veteranos, niños y ciclistas ocasionales se juntaron por la mañana en la Praza do Concello para participar en el recorrido, uno de los más largos de los últimos años.

Los jóvenes del Club Ciclista Carballo a un paso marcaron el ritmo, con muy buen criterio y con una madurez destacable. Incluso en muchos cruces hicieron de guardias para prevenir incidentes con conductores despistados. Con apenas 5 minutos de retraso dio la salida el edil de Deportes, Marcos Trigo, que también se enfundó la camiseta y pedaleó al lado de centenares de vecinos. Antes de dirigirse hacia Berdillo hubo un primer reagrupamiento. La gran cantidad de niños pequeños hacían aconsejable evitar que ya el largo pelotón se desperdigase y tratar de evolucionase bien conjuntado. Al fin y al cabo, el Día da Bicicleta está concebido como un paseo en el que el cultivo de la amistad, la apuesta por el transporte limpio y el ejercicio físico son los puntos primordiales.

En Berdillo, la comitiva pasó cuando la gente se dirigía a la iglesia. La mañana era plácida, ni frío ni calor. Media hora después de terminar el recorrido y el sorteo de los regalos, cayó un aguacero. La marcha discurrió entre las aldeas y los campos de labor: Casas Novas, A Ponte, O Fondal y O Ferradal. La Vila de Negreira fue el punto de entrada de nuevo en Carballo para dirigirse al aparcamiento de Centro Comercial Bergantiños para el avituallamiento. Tras el descanso reparador, el enorme pelotón, con más de 600 ciclistas, reanudó la marcha hacia el Camiño do Muíño y la avenida del Ambulatorio para regresar de nuevo a la Vázquez de Parga y entrar triunfal de nuevo en la Praza do Concello, donde se efectuó el sorteo de regalos. La vigésimo primera edición concluyó así como una muestra de compromiso de la ciudadanía con una jornada convivencia sana.