«Tener que estar en la calle es terrible, tengo 32 años y parece que ya paso de los 50»

La Voz

CARBALLO MUNICIPIO

Tres usuarios del albergue carballés explican su situación: son Pedro, María y Elder

30 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Llegaron los tres juntos el lunes por la tarde. Cuando no hay dinero ni mucha esperanza, la amistad y la compañía es lo poco que se puede juntar. Pedro José Alarcos Gómez, 48 años, de Madrid, con su pareja María del Mar González Varela, coruñesa de 51, y Elder Nunes Amaral, portugués de Valença do Minho, de 32. Ayer, antes de comer (el servicio de albergue incluye el alimento y el aseo), resumían su situación. «Soy panadero. Llevo siete años recorriendo España. A pie, en bus, en lo que pueda. Si reúno dinero para un billete lo compro, o en auto-stop. He pasado por el País Vasco, por Ferrol, por Cáceres, por Plasencia. No me quedo quieto», dice Elder. Ha aguantado mucho frío: «Estar en la calle es terrible, tengo 32 años y parece que paso de los 50. Nunca sabes qué va a pasar, si vas a dormir en una cama o no». Asegura que en Carballo está «muy bien».

También ha pateado mucha calle Pedro Alarcos, desde que llegó a Galicia hace tres años, procedente de San Fernando de Henares. Pasó por algunos centros para tratarse adicciones. Hace tres meses conoció a María y desde entonces están juntos. Como únicos recursos, cobra la renta activa de inserción (426 euros). Ella, nada. Reciben alguna ayuda ocasional, pero no es suficiente. Estas Navidades han pasado tres días durmiendo en la calle. También ha pedido: «Ya no me da vergüenza cuando no me queda más remedio», explica. Dice que podría trabajar en lo que fuese, pero no le sale nada. También su compañera lo ha buscado, sin éxito. Su horizonte más cercano está en Carballo. Después, ya se verá.