María Vila llevó ayer flores a su abuela al cementerio de Carballo
02 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Aunque las visitas al cementerio y a los seres queridos fallecidos se hagan con cierta frecuencia, el Día de Todos los Santos y el Día de Difuntos es especial. En el camposanto de Carballo estaba ayer por la mañana, entre otras muchas personas, María Vila. Había mucho movimiento de coches y de visitantes. María acudía al cementerio para llevarle flores a su abuela. En diciembre hará siete años que falleció: «Para nós, a nosa avoa era coma a nosa nai, unha persoa moi importante». Aunque tratan de visitar el camposanto con asiduidad, a veces no se puede hacer con la frecuencia que uno querría, de ahí que estos días sean tan importantes para el recuerdo. Sobre las flores, María afirma que ya confían en la floristería y en su buena elección, por lo que no tienen preferencia por una flor o por otra. Este año, fueron rosas blancas y verde africano.