El arte planta cara en Carballo a la deshumanización

Á. Palmou CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Pixel Pancho, ayer al mediodía, trabajando en uno de los cerdos de su mural de la calle Gran Vía.
Pixel Pancho, ayer al mediodía, trabajando en uno de los cerdos de su mural de la calle Gran Vía. JOSÉ MANUEL CASAL< / span>

Pixel Pancho comenzó a trabajar ayer en su mural y Bordalo II tuvo que mudarse de la Huerta del Casino del Fórum

04 jun 2015 . Actualizado a las 11:04 h.

Pixel Pancho está acostumbrado no solo a derribar muros con pintura -tal como reza la iniciativa carballesa de la que ha emanado este Rexenera Fest-, sino también a luchar por demoler las paredes mentales de una sociedad enfangada en el consumismo y la deshumanización.

La rapidez con la que maneja la grúa, los rodillos y las brochas para extraer vida de una enorme pared de la calle Gran Vía solo es comparable con la velocidad con la que comparte impresiones e ideas con los visitantes que se interesan por su arte. «No entiendo a la gente que solo piensa en el dinero; el dinero debería ser un medio, no un fin, una forma de simplificarnos las cosas», relata este joven creador de ascendencia austríaca e italiana que ha recorrido medio mundo con su arte a cuestas. «Acabo de llegar de Marruecos, así que venía esperando encontrarme con algo de fresco, pero no ha sido así», resopla antes de proseguir con un relato en el que se entremezclan la indignación y cierto pesimismo -«hay una minoría de gente muy mala, otra minoría muy buena y una gran mayoría que no piensa»-, pero también la esperanza de que sus murales despierten alguna conciencia.

La naturaleza y la mecanización son dos constantes de una obra que en Carballo ha dejado fluir -«alguna idea sí tenía antes de venir, pero no muy clara»- en forma de una secuencia porcina que ya ha sido objeto de crítica por parte de algún vecino; aunque sin llegar al extremo de lo sucedido con Bordalo II, cuya propuesta con materiales de desecho no fue bien recibida en la huerta del Casino y ha tenido que mudarse al Fórum.

Pixel Pancho achaca algunas críticas a la incapacidad para ver más allá, pero señala que el arte también puede ayudar de forma directa a mejorar la vida de las personas. Así ha ocurrido con una intervención en la que colaboró en Australia y que ha convertido unas viviendas de una zona desértica en foco de atracción turística. Y así podría ocurrir en Carballo si el Rexenera Fest se convierte en un éxito.