Las tijeras del misterio en Carballo

CARBALLO MUNICIPIO

José Manuel Casal

Sokram, el autor del mural del Pazo, cree saber quién intervino sobre su obra

07 feb 2015 . Actualizado a las 00:29 h.

Ya hay sospechosos. Y, quizás, solo quizás, un fin de la historia. A principios de noviembre, el mural del Pazo da Cultura carballés integrado en el proyecto Derrubando muros con pintura amaneció repintado. Alguien, una o varias personas, habían plasmado unas tijeras rojas y una línea de corte sobre el impresionante lápiz escalado por varias siluetas al que, tan solo un mes antes, había dado vida Sokram, artista multidisciplinar y parte del colectivo Dios ke te crew (Ordes). Aquellos días hubo disparidad de opiniones. Para unos, las tijeras eran vandalismo. Para otros, una intervención a la que está expuesto el arte en la calle. Se especuló incluso con que pudiese haber sido el propio autor, el mismo Sokram.

No en vano, hoy presenta en Carballo un disco titulado Chuvia ácida donde la portada está protagonizada, en parte, por tijeras. Sokram charló ayer en Radio Voz Bergantiños sobre el trabajo discográfico y sobre el mural. Negó ser el autor de las tijeras y, es más, cree saber quiénes intervinieron su obra. «Cando foi iso, eu xusto estaba fóra de Galicia, así que me enterei uns días despois», apunta. «Ao principio non me fixo graza, claro, aínda que ao estar na rúa estás exposto a que pase. Pareceume de certo egoísmo pola súa parte, por intervir a obra doutra persoa sen permiso. Primeiro, porque se se copia, cópiase ben. Segundo, porque terían que telo feito con máis coidado...».

Humo en la ciudad

¿De qué copias y de quién habla? A los pocos días de conocer lo sucedido, Sokram recibió de un amigo el enlace a un vídeo donde se explicaba una rocambolesca historia que, con todas las cautelas que uno pueda tomar de lo leído y visto en la red, parece reivindicar la autoría de las tijeras rojas. El colectivo en cuestión, que de algún modo asume la intervención, se llama Humo en la ciudad, «un grupo de acción urbana nacido en Valencia que ás veces interveñen en obras artísticas na rúa promocionadas por algunha institución», explica Sokram. En la web del grupo (un blog) escriben de la historia y de un viaje a Galicia desde Barcelona, donde habrían conocido a un tal Hugo. Abordan así cómo se gestó esta peculiar idea.

El integrante de Dios ke te crew lo ve como un fake (una falsa imitación) de Banksy, el artista urbano o graffitero «máis coñecido do mundo». Británico. No solo imitación por lo de las tijeras o por la forma en la que está hecho el vídeo, sino porque el mismo día que se descubría lo sucedido en el Pazo, apareció otra pintura en Carballo. Una rata con un rodillo (en la imagen) que a los seguidores de Banksy también les habrá resultado familiar. Junto a la rata, un mensaje: «Un pueblo que perdió el norte, una máquina cultural que navega a la deriva».

En el blog, Humo en la ciudad se hace eco del revuelo que despertaron las tijeras en Carballo y facilita un correo para quienes se crean afectados. «Entendemos esta propuesta [sus acciones]como una vía de recuperación del espacio público. (...). Nuestra estrategia se basa en la búsqueda de lugares clave para lograr el equilibro entre impacto visual y supervivencia de las manifestaciones plásticas», informan en el campo biográfico del equipo.

Aún bajo las tijeras, el lápiz de Sokram sigue siendo una obra espectacular a la que él quiere que cada persona que la vea busque significado. Bien podría ser, dice, además del símbolo de la cultura, una metáfora del camino de superación que cada uno ha de emprender, «o seu propio lapis». Como una montaña. A veces hay caídas, tropiezos... y competición.