El Concello de Camariñas se someterá a un plan de ajuste que incluye reducción de dietas a los ediles

El gobierno local de Camariñas llevará mañana al pleno un plan de ajuste con el Ministerio de Hacienda que le permitirá agilizar el pago de proveedores y, con ello, empezar a hacerse cargo de una muy abultada deuda que ha ido creciendo a lo largo de los años hasta hacerse insostenible. Hasta ahora no había podido acogerse al programa estatal porque las cuentas arrojaban remanentes positivos, aunque estos eran ficticios por la forma de llevar la gestión. Así, las partidas no se agotaban a final de año, pero eso era, en parte, porque no se habían realizado muchos de los pagos pendientes.

El Concello ya ha enviado a la Agencia Estatal de Administración Tributaria la lista de proveedores, que esperan por, al menos, medio millón de euros. A estos empresarios se les notificará la inclusión de sus facturas para que acepten el cobro por este procedimiento.

La carga de la deuda ya se notará mucho en los presupuestos de este año, que probablemente se aprobarán en abril. Los del 2021 se acercaron a los 5 millones, lo que significa que solo la deuda a los proveedores supone el 10 % de todos los ingresos municipales.

En las cuentas del presente año se incorporarán 360.000 euros que corresponden al 2021, además de 50.000 euros que el Concello debe ahorrar en cada ejercicio para ir pagándole al Estado. En principio, hay cuatro años de carencia y a partir de ahí ya tendrá que ir devolviendo esa cuota como mínimo.

Además, el Concello de Camariñas tendrá que aplicar una serie de medidas para incrementar sus ingresos. Se centrarán especialmente en la actualización de impuestos y tasas como los de sumideros, «que levan 20 anos sen tocar», explicó la alcaldesa.

Ya se han empezado a aplicar algunas medidas como la subida del ICIO y se tomarán tras como el incremento de las tasas por licencias urbanísticas, la expedición de documentos o varios precios públicos, además de recuperar la ordenanza de regulación de terrazas.

Asimismo. ya se ha reducido el número de comisiones y plenos y ahora se hará lo mismo con las indemnizaciones por asistencia, lo que permitirá ahorrar unos 10.000 euros al año.

Además, en el POS de este año ya se han incluido 141.173 euros para el pago a proveedores, y 10.587,98 para la reducción de la deuda con entidades financieras que ha llegado a rondar el millón de euros.

La situación también ha obligado a reducir el personal, que se lleva 1,7 millones de euros anuales. Se ha amortizado hasta el momento una plaza de policía y otra de peón.

Reuniones con la Fegamp para hallar una salida

«Esta medida sae das reunións coa Fegamp que mantivemos varios concellos que estamos na mesma situación para buscar unha fórmula que nos permitise cumprir as nosas obrigacións cos provedores», explicó la alcaldesa. Por lo que se refiere a los motivos por los que se ha llegado a esta situación Sandra Insua también puso el foco sobre «as competencias autonómicas que nos vemos obrigados a asumir os concellos pequenos sen o debido financiamento, como a xestión dos cans abandonados, os servizos sociais ou o emprego e que xeran un sobre custe que provoca un retraso no pago do resto facturas que temos que solucionar»

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