Olga Campos: «O que fai falta é unión e apoio»

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CAMARIÑAS

Diego Alonso

Gentes del Finis Terrae | Repite en la presidencia de los empresarios de Camariñas tras tres mandatos, pero espera que haya recambio

26 ene 2022 . Actualizado a las 19:40 h.

Olga Campos Sánchez (Camariñas, 1960) es la nueva presidenta de la Asociación de Empresarios de Camariñas. Si se repasa la hemeroteca, la historia se repite (y no es la primera vez, ni la segunda): no hay candidatos alternativos y los compañeros le piden que continúe. Y eso es lo que pasó en la asamblea de socios (son 65 de todo el municipio) celebrada el lunes por la noche en el Centro de Iniciativas Empresariais, que funciona como sede de la asociación desde hace ya mucho. 

Tras doce años ininterrumpidos en la presidencia, enfila su cuarto mandato, aunque esta vez asegura que aguantará un año como mucho, sin completar los cuatro reglamentarios, esperando que en los próximos meses aparezca un relevo. «Fai falta que entre xente nova, pero non se presentaron. Isto ten que ter unha continuidade para que siga adiante e polo menos que non se disolva», apunta.

No va muy desencaminada porque, en efecto, en varios municipios de la Costa da Morte había hasta hace pocos años diversas asociaciones de empresarios que se han quedado en nada, o el algún acto muy concreto a lo largo del año, sin el dinamismo anterior.

Camariñas resiste, y además con mínimos cambios en la junta directiva, de la que sale su hermana, que se jubila, y era secretaria, cargo que asume Reinaldo Tajes, otro de los pilares históricos de la entidad, de la que ya fue presidente (y Olga vicepresidenta con él). También está José Ameal, como tesorero, igualmente veterano.

Olga insiste en que los jóvenes son necesarios para el futuro de la asociación, y además los veteranos están cansados de dedicar tanto esfuerzo, a menudo no reconocido ni recompensado. Campos admite que en muchas ocasiones le dedica más tiempo al colectivo local de empresarios que a su propia vida, y eso que estos últimos meses han sido más tranquilos por los evidentes motivos de la pandemia, que lo ha ralentizado todo. Pero, aun así, tienen proyectos. «Temos un para o castelo do Soberano que non nos deixan facer. E temos Vilán, que mantemos grazas á Deputación, só a nós e a Deputación, e agora parece ser que hai por aí algo da Autoridade Portuaria do que non sabemos nada aínda», explica.

Pero la labor de promoción turística de la entidad forma parte de su trabajo diario (y del nombre de la asociación, que no se limita solo a los empresarios), y Vilán es todo un estandarte que cuesta mucho mantener. Con todo, han organizado numerosas actividades en el recinto farero, además de la divulgación de los atractivos turísticos de Camariñas. Y muy variadas: desde los campeonatos de pesca hasta O Encaixe no Camiño, que lleva la recreación histórica a la localidad, recordando el desembarco del rey Alfonso IX y la importancia que tuvo para toda esta zona. En cuanto a los terrenos del castillo del Soberano, tuvieron que renunciar a una subvención al ver que no iba a salir adelante porque no les dieron permiso.

Más allá de lo que ha ocurrido en esta asamblea, Olga aboga por trabajar juntos, y cuantos más, mejor. «O que fai falta é unión e apoio. Unidos é como chegamos lonxe. Se esperamos que sexan outros os que nos fagan as cousas, aí non imos conseguir nada. Á casa non nos traen nada».

La presidenta reconoce que muchas veces no es fácil, ya no solo por el trabajo que genera: «Moitas veces tamén tes que aguantar ese tópico de que se estás aí é por algo, seguro que che convén, e non é así», protesta. Aclara: «Se algo nos convén é como veciños de Camariñas, pero porque nos interesa a todos, non a unha persoa en particular», de ahí que insista en la necesidad de lograr cuanto más apoyo, mejor.

Para estas inminentes Navidades no hay nada previsto de momento, y eso que durante varios ejercicios hubo campañas de promoción especiales, como en otros lugares de la comarca. «Non falamos nada porque, como a decisión era a de non seguir, non miramos nada», lamenta. Además, este tipo de iniciativas requieren un tiempo y unas ayudas que en este caso no se han tramitado, y tal y como está la situación sanitaria tampoco es seguro organizar nada.