Media tonelada de navaja tirada al mar sin motivo

j. v. l. CEE / LA VOZ

CAMARIÑAS

ANA GARCIA

La analítica privada revela que el producto no tenía toxina, pero el Intecmar defiende que el sistema funciona

11 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La analítica oficial de la muestra cogida el lunes por los mariscadores del longueirón de Camariñas y Muxía dio negativo, con lo que ahora, pasadas 48 horas, se realizará otra y, en caso de que los valores se mantengan, probablemente a partir del jueves o el viernes los profesionales podrán volver a trabajar.

Es más, la muestra que los propios submarinistas mandaron a analizar por su cuenta de los aproximadamente 450 kilos que tuvieron que tirar al mar el sábado pasado, también ha dado negativo, con lo que se ha demostrado que arrojaron por la borda casi 5.000 euros en producto ya extraído. De hecho, ellos ya estaban convencidos, como trataron de demostrar comiéndose ante una reportera gráfica de La Voz marisco del que iban a tirar.

Sin embargo, nada de eso significa que el Intecmar, el laboratorio profesional dependiente de la Xunta que se encarga de las analíticas, actuase de manera incorrecta. Lo reconocen los propios mariscadores, que ahora buscan otras soluciones para su conflicto, y los explica la Consellería do Mar.

Desde el departamento dirigido por Rosa Quintana insisten en que la finalidad principal del sistema que «funciona ben» es «protexer ao consumidor». Para ello, en la ría de Camariñas se están realizando en los últimos tiempos dos, tres y hasta cuatro muestras semananales.

Es más, Mar aclara que el procedimiento es rápido y que los resultados se pueden obtener en un solo día. A partir de ahí, la información se le transmite a los mariscadores de manera inmediata, casi siempre con 12 horas de antelación al inicio de la siguiente jornada de trabajo.

En este caso, la Xunta lleva alertando de la presencia de toxina desde principios del mes de junio. Se están registrando en Galicia concentraciones importantes de células de fitoplancton que producen biotoxinas lipofílicas y también paralizantes. De hecho este es el motivo que ha llevado a la consellería a incrementar la frecuencia de los muestreos.

El motivo concreto del cierre del viernes en la ría de Camariñas fue la detección en una muestra de berberecho recibida en el Intecmar ese mismo día de toxinas paralizantes. A partir de ahí, los profesionales, como explican desde la Xunta, tienen la opción de devolver el marisco al mar o de realizar un autocontrol en uno de los laboratorios autorizados que garantice que el producto no presenta problemas para el consumo humano.

Precisamente en esta línea es en la que quieren trabajar los profesionales de la zona para evitar más problemas de este tipo.