La toxina frena la gran campaña del berberecho en el pósito camariñán

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CAMARIÑAS

FERREIRO

La venta de molusco extraído el pasado viernes queda pendiente de una analítica

15 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La campaña del berberecho en la cofradía camariñana iba viento en popa en las últimas semanas, gracias, en gran medida, a las elevadas cotizaciones del molusco en las lonjas. El cierre de las concesiones en el pósito noiés ayudó, y mucho, a este repunte de los precios del marisco, que lejos de decrecer, aumentaron con el paso de las jornadas, mejorando así los ingresos medios de los productores.

Sin embargo, hay dos elementos que parecen haber enturbiado esta campaña extractiva. Primero, las desavenencias que mantienen los mariscadores sobre los días en los que se puede ir a trabajar y, segundo, el cierre de las concesiones por la presencia de toxina.

El aviso por parte de la Xunta de que la extracción quedaba paralizada hasta nueva orden llegó a la entidad marinera camariñana este pasado sábado por la mañana, aunque los 80 profesionales que el viernes salieron a mariscar desconocían ayer si iban a cobrar por sus capturas. Estrella Lema, presidenta de la agrupación de mariscadores de Camariñas, explicó ayer que toda la producción lograda el pasado viernes «foi xa entregada a unha depuradora da zona de Arousa, que terá que facer as analíticas da toxina». Y añadió: «Se dan positivo haberá que entregar todo o berberecho ao mar e se dan negativo, venderase e os mariscadores cobrarán», apuntó Estrella Lema tras mantener una reunión con la patrona mayor, Dolores Bermúdez.

Por su parte, Ramón Lema, secretario de la agrupación de mariscadores de a pie y a flote de la cofradía de Camariñas, teme que los profesionales del sector «uns oitenta», que el viernes acudieron a trabajar a los bancos marisqueros «perdan todos os ingresos», estimados por él, «nuns 130 euros por mariscador», correspondientes a los cupos: «14 quilos de berberecho e dous de ameixa xapónica». Y añadió: «A decisión da presidenta da agrupación [Estrella Lema] de recortar os días de traballo ten estas consecuencias», en alusión al conflicto que mantienen dos bandos con respecto a las jornadas a las que se puede ir a faenar. Según Ramón Lema, «a decisión de non poder mariscar o martes e o mércores da semana pasada ten estas consecuencias e agora botamos as mans á cabeza», dejando claro que esta decisión afecta «tanto aos mariscadores de a pé como de a frote».

Una versión que contrasta con la facilitada ayer por la presidenta de la agrupación de mariscadores, Estrella Lema. «Aquí ninguén dixo que non se poida traballar, pero si que hai que fixar unhas regras para facelo. E esas normas consensúanse. Hai que traballar, si, pero de acordo ao que diga a maioría». Y achacó los cambios en los días de trabajo a las mareas. «O pasado luns a xente rematou ás sete da tarde cando o tope é ás seis. As condicións das mareas non eran boas nin o martes nin o mércores, por iso se decidiu por maioría suspender as xornadas, que se reiniciaron o xoves». Ahora queda por saber cuándo remiten los efectos de la toxina en los bancos marisqueros adscritos al pósito camariñán.