El mar dejó alturas de ola e imágenes llamativas en todo el litoral
18 abr 2018 . Actualizado a las 19:07 h.La sucesión de borrascas que la Costa da Morte lleva meses recibiendo, hasta el punto de que no se puede decir que hubiese una primavera como tal, parece que termina. Al menos las previsiones no dan más lluvias de consideración hasta el domingo. Pero ha querido hacerlo por todo lo alto. Los vientos del sur y el suroeste de la jornada de ayer dejaron imágenes verdaderamente espectaculares en los muelles de la Costa da Morte.
El teniente de alcalde de Fisterra, Xan Carlos Sar, por poner un ejemplo emitió en directo en sus redes sociales el aspecto de la playa da Ribeira. Incluso una vecina se acercó para explicar que antiguamente «o mar chegaba ata as casas», lo que da idea de la expectativa que generó la estampa.
«Aquí antes había algunha casa, pero tamén había chabolos [casetas de los marineros] e meu pai tenme contado como nunha ocasión lle varreu o aparello da porta a un veciño», relata Sar, que también recuerda como en su infancia jugaban a lo que llamaban «pasar perigos» en esa zona sorteando los envites del mar y en día como estos «meu pai viña darnos aviso para que non pasásemos». Eran ya tiempos en los que carretera estaba construida y, en más de una ocasión, las enormes piedras de la escollera acababan en medio del asfalto. Actualmente eso ya no ocurre, incluso en jornadas de tanto viento y mar de fondo como la de ayer, seguramente por los efectos que tiene el dique sobre el comportamiento del mar.
Esos precisamente, los diques, fueron el principal centro de atención ayer en prácticamente todas las localidades costeras de la zona, porque suponía un verdadero espectáculo ver en Corme, en Camelle, en Malpica, o en cualquier otro puerto, como las olas golpeaban contra el hormigón y se levantaban varios metros por encima de la gente.