Provoca un accidente, se da a la fuga y da positivo en alcohol

La Voz CARBALLO / LA VOZ

CABANA DE BERGANTIÑOS

Sucedió el pasado 30 de julio en la AC-552, en Nantón, Cabana

07 ago 2017 . Actualizado a las 12:05 h.

El pasado día 30 de julio se produjo un accidente de circulación a la altura del kilómetro 47,600 de la carretera AC-552 (Coruña-Cee), en el que un turismo se sale de la vía por el margen derecho para evitar la colisión con otro vehículo que circula en sentido contrario e invadió su carril. Tras dar aviso del accidente, se estableció un dispositivo por parte de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, en el que una patrulla del Destacamento de Corcubión localiza al conductor del vehículo que provocó el accidente, en una Estación de Servicio de la localidad de Natón, a unos 5 kilómetros del siniestro y dos horas después, gracias a la colaboración ciudadana de varios testigos. El conductor de la furgoneta que provoca el accidente, un varón de 43 y vecino de la zona, presentaba síntomas de encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Se solicita la realización de las pruebas de alcoholemia mediante aire espirado, al estar implicado en el accidente de circulación acaecido anteriormente y este se niega a realizar las mismas.

Por parte del Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil en A Coruña, se le investiga por dos supuestos delitos contra la seguridad vial, uno conducir un vehículo a motor bajo la influencia de bebidas alcohólicas y otro por negarse a someterse a las prueba de alcoholemia legalmente establecidas al estar implicado en un accidente de circulación. El hecho de conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, o superar la tasa de 0,60 MGS/L, conlleva aparejada una pena de prisión de tres a seis meses o multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y en cualquier caso, con la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior de uno y hasta cuatro años.

Negarse a someterse a las pruebas legalmente establecidas para la comprobación de las tasas de alcoholemia y la presencia de drogas toxicas, estupefacientes y sustancias psicotrópicas, conlleva a las penas de prisión de seis meses a un año y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.