Los aseos públicos son aún una asignatura pendiente en la zona

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

A LARACHA

ANA GARCIA

Los baños son una necesidad, pero su mantenimiento es complicado y los concellos los evitan

11 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las lluvias de esta noche habrán borrado ya los rastros, pero desde mediados de julio, cascos urbanos, campos de fiestas e incluso muros de iglesias han estado conservando orines y no solo de canes. La falta de aseos públicos ha terminado por desencadenar un problema sanitario que se multiplica con el calor. Si la situación es seria cualquier día del año, empeora notablemente en celebraciones, romerías o ferias.

No solo no hay aseos públicos fijos, sino que los desmontables escasean, hasta el punto de que faltan en la mayor parte de concentraciones humanas.

Los aseos públicos podrían ser una solución a la falta de higiene de algunas personas. Es cierto que no todos los utilizarán, pero también que quizá se eviten vertidos humanos innecesarios.

Tras alguna fiesta se pueden encontrar incluso heces humanas es espacios resguardados, sobre todo porque los baños de los bares o restaurantes tampoco dan abasto.

Antiguamente era corriente que hubiera este servicio y que incluso diera trabajo a una o dos personas y numerosas ciudades europeas se pueden encontrar con facilidad. En muchas ocasiones es necesario pagar para poder entrar, lo que garantiza el buen estado de las instalaciones.

Recientes

En la Costa da Morte solo hay aseos públicos en A Laracha y Carballo. En ambos casos se trata de instalaciones bastante reciente. Los servicios carballeses se construyeron al mismo tiempo que el parque do Anllóns. Desde hace mucho tiempo, hay pintadas, al igual que en todo el entorno. La zona se encuentra resguardada de las miradas y no hay viviendas muy cerca. Han actuado los vándalos en la caseta, el muro de la estación de autobuses y las pistas de hockey y para monopatines.

En el caso de A Laracha, la obra aún es más reciente. Nació con la reforma del parque infantil que hay al lado de la casa consistorial. Es más nuevo y está mucho más controlado. No ha sufrido problemas de vandalismo, pero la puerta sí ha recibido algunos balonazos y se ha hinchado por el agua.

En ambos casos las instalaciones están bastante limpias, aunque son mucho mejores las de A Laracha, destinadas a los usuarios de la zona de juegos infantiles. Incluso hay papel higiénico y de manos.