04 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.
Ya desde que iba al colegio Ana Isabel Zas recuerda ir andando a los Milagres de Caión. Unas veces, «por pasalo ben» y, otras, «por ofrecemento». Ya su bisabuela lo hacía y en casa han continuado con la tradición: «Normalmente, nós imos sempre o día da subida». Siguen también con la fe: «Ata o de agora, o que lle pedín cumpriuse», indica. Ayer salió a las 08.30 de Loureda (Arteixo). Para ella fue una jornada de doble ofrenda, ya que por la tarde iban a acudir a la Virxe da Cabeza.