Buena parte del mapa del transporte escolar de la comarca está desfasado
A LARACHA
Siete niños y sus madres andan 800 metros en A Laracha porque el bus no se desvía y eso que pasan tres por allí
03 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La ANPA del colegio Otero Pedrayo de A Laracha ha enviado a la Xunta una nueva solicitud para que alguno de los tres autobuses del transporte escolar que pasan por la carretera de Golmar, a la altura del cruce al lugar de A Viña, se desvíe hasta el lugar, que está a 800 metros, para recoger a los siete niños, todos muy pequeños, que viven allí. La parada seguirá vigente durante años, porque además de los pequeños que van al cole acaba de nacer otro vecino y una de las madres está embarazada, por lo que en solo tres años, los escolares serán 9.
La queja viene porque todos los días deben caminar los 800 metros por una pista sin apenas luz y ni aceras, mientras por la carretera pasan tres autobuses que hacen casi el mismo recorrido. La Xunta respondió que no había 2.000 metros entre paradas, pero eso es algo normal y de hecho en el transporte larachés incluso hay una en el centro del pueblo, lo que incumple la normativa.
Peligro. Para complicar más las cosas. La parada para los escolares de A Viña está en un cambio de rasante, cerca de una curva. La ANPA notificó el problema para conseguir que el bus entrara en la pista hasta el lugar, pero solo logró que la movieran en la misma carretera. Además, la empresa de transporte alegó que no podría girar en el lugar, cuando si lo hacen otros autobuses, para los que acuden a los entierros, por ejemplo.
Cerqueda. El caso de A Viña no es único. Buena parte del mapa del transporte escolar de la Costa da Morte está completamente desfasado. A finales del 2014 un grupo de madres de Loroxo, en Cerqueda, reclamaba que la parada se trasladara al lugar. La que había quedado estaba a 1,3 kilómetros y allí hacía años que no había niños, pero la de Loroxo fue inhabilitada hacía mucho tiempo por falta de escolares. En la demanda se implicó el Concello y el colegio, pero las madres tardaron años en conseguir que se rehabilitara la parada donde había niños y se abandonara la que estaba vacía, no tenía ni marquesina y estaba en una zona aislada.
Sofán. El servicio de comedor en el colegio de Gándara-Sofán, en Carballo, además de la jornada única, votada hace justo un año, además de la alta demanda del Fogar, ha hecho que crezca la matrícula en lo que era una pequeña instalación para atender a los escolares de la parroquia. Uno de los problemas que tuvieron fue con el transporte porque había una docena de niños del casco urbano carballés que iban en autobús porque había espacio, pero al aumentar la matrícula en Berdillo y Artes, que tienen preferencia, quedaron sin el servicio. Una negociación con la Consellería de Educación resolvió el problema.
Distancia. En teoría, solo los niños que viven a más de dos kilómetros del colegio pueden usar el bus y las paradas han de estar a esa distancia unas de las otras, pero en muchas ocasiones, sobre todo en la zona rural, las zonas de estacionamiento no reúnen las condiciones mínimas, porque están aisladas y no hay marquesina. Las asociaciones de padres se quejan de que las líneas no se corresponden con las necesidades, no se han actualizado, por lo que las hay innecesarias, ya que están incluso triplicadas, en tanto que otras son excesivamente largas.