Los médicos estrenan maletín

R. D. A CORUÑA / LA VOZ

A LARACHA

Los PAC (en la foto, el de Culleredo) han incorporado camillas, carros de emergencias y maletines.
Los PAC (en la foto, el de Culleredo) han incorporado camillas, carros de emergencias y maletines. m. míguez< / span>

Los 13 Puntos de Atención Continuada del área sanitaria coruñesa renuevan su equipamiento y se forman para prestar mejor asistencia a las emergencias

07 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Los Puntos de Atención Continuada, los que atienden las urgencias fuera del horario de los centros de salud, están de estreno. En las últimas semanas y después de analizar las carencias que sufrían, han ido recibiendo nuevos equipos para tratar de mejorar la asistencia sobre todo a los pacientes más graves. Son trece en el área coruñesa, Casa del Mar, Cambre, Culleredo, Betanzos, Curtis, Arteixo, Oleiros, Sada, Carballo, A Laracha, Vimianzo, Ponteceso y Cee. «Los recorrimos todos, los fotografiamos y vimos que había cierta heterogeneidad, desde carros de parada muy antiguos a monitores obsoletos, casi ninguno tenía camillas hidráulicas», cuenta Francisco Martínez, del PAC de Curtis.

Pero la «estrella» de la nueva dotación son los maletines con los que médicos y enfermeras salen a atender a pacientes a los domicilios o a la calle ante cualquier emergencia. «Los que teníamos eran difíciles de manejar -añade Isabel Expósito, del PAC de Culleredo- y además se rellenaban según el criterio del profesional: hay mucho personal eventual y es importante que todo el mundo, independientemente del centro en el que le toque trabajar, sepa dónde está cada cosa porque si sales a atender un accidente, por ejemplo, no tienes tiempo para pararte a buscar».

Ahora, cada equipo asistencial de cada PAC (por ejemplo, Carballo tiene 2 y la Casa del Mar, 3), cuenta con su maletín de emergencias, que además se ha aprovechado para que incorporen material hasta ahora no disponible que puede resultar vital. Como las agujas intraóseas o las mascarillas laríngeas.

Ya en los propios centros, se han puesto las camillas, los carros de paradas, se han renovado los monitores-desfibriladores con opción de marcapasos, se han puesto electrocardiógrafos digitales, tensiómetros-saturímetros con carro, lámparas de lupa, mobiliario diverso y, de paso, también los uniformes. En el de Culleredo, por ejemplo, la enfermera María Jesús Garrido bromea con las múltiples formas y saltos con los que uno puede llegar a subirse a una camilla fija: «Es broma, pero no sabes lo complicado que puede resultar movilizar a un paciente si no cuentas con una camilla hidráulica». Qué decir del que denominan carro de emergencias, un auténtico armario de material que Misuka, así la llaman, muestra no sin orgullo. Allí se guardan, convenientemente ordenado, elementos básicos para su quehacer cotidiano.

En total, 132.000 euros de inversión que, insisten los profesionales, facilitan su día a día y pueden ayudar a salvar a los pacientes más graves a los que, más veces de las que se piensa, tienen que prestar los primeros auxilios y estabilizar para que lleguen vivos al hospital.

Gira de reciclaje

«Al César lo que es del César, la Xerencia, y el director de procesos sin ingreso, Alfredo Silva, ha sido sensible y ha hecho un esfuerzo», subrayan tanto Martínez como Expósito y Estrella Martínez, enfermera del PAC de Carballo. Los tres, junto con Santiago Martínez, se encargaron además de hacer una gira por todos los centros para formar a los profesionales que allí trabajan en horarios imposibles: 74 médicos de familia, 56 profesionales de enfermería y 67 de administración, además de todo el personal sanitario del área que se presta voluntariamente a cubrir guardias. Utilizando maniquíes sanitarios, se trataba de hacer un reciclaje de habilidades en el manejo de personas graves poniéndose en situación, «no lugar no que as vas ter que atender», subrayan, ya que a menudo llegan allí donde no puede entrar ni la ambulancia medicalizada. Para una caída grave, un accidente de tráfico, un infarto, el corte de una motosierra, un aplastamiento de tractor o un parto. Calculan que de cada 20 asistencias, una es fuera del centro y, a veces, ellos mismos se sorprenden de cómo -e incluso de dónde- se puede llegar a sacar adelante a un paciente realmente urgente.