01 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.
Los CIM provocan al menos una doble lectura. La primera, lo necesarios que son, cada vez más, en un mundo cambiante y de problemas acuciantes para tantas mujeres que es preciso resolver o encauzar, ayudar y asesorar. La segunda, que ojalá no lo fueran, pero esta es una visión utópica. De hecho, lo que precisan son más medios, más personal, a la vista de que la violencia machista, en sus diferentes formas (la primera de sus urgencias, una más de sus funciones) no decrece. O, al menos, se denuncia más.