La elevada dispersión territorial y la escasez de medios dificultan la tareas de limpieza
08 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Rotondas, intersecciones e incorporaciones hasta arriba de maleza que dificultan la visibilidad de los conductores. Señales de curva peligrosa, de ceda el paso o de stop ocultas bajo el intenso verde de las silvas. Senderistas y peatones sin apenas espacio donde poder caminar por culpa de la hierba alta o cunetas completamente tapadas porque todavía no han pasado la desbrozadora. En la arteria principal de la Costa da Morte, la AC-552, hay varios tramos, como sucede entre Baio y Carballo, en los que las máquinas todavía no hicieron acto de presencia desde hace meses. O como sucede en el vial que une Baio con Laxe. Escolares y usuarios del transporte público que tienen que sortear la vegetación para guarecerse en una marquesina de las últimas lluvias procedentes de la borrasca Óscar.
Y eso que, según apuntaron varios alcaldes de la Costa da Morte, las tareas de limpieza arrancaron ya hace varias semanas: «Brens ya está limpio, estamos trabajando en Gures y A Ameixenda, y en A Pereiriña y Toba casi hemos terminado», apuntó la regidora ceense, Marga Lamela. En Malpica ya han dado un primer repaso a todo el tramo que enlaza con la capilla del Santo Hadrián. También se pasó el tractor y las desbrozadoras en los viales que transitan y cruzan las principales parroquias.
En Laracha, los técnicos de la Xunta desbrozaron todo el tramo anexo a la senda que enlaza con O Cancelo, en las inmediaciones de la urbanización Montes Claros y ayer lo hacían en el tramo peatonal que une A Laracha con Paiosaco (margen derecho sentido A Coruña). En lo que al Concello se refiere, los trabajos de mantenimiento dela red viarias se refiere arrancaron la semana anterior a las elecciones municipales y la primera actuación se llevó en la entrada y acceso al emblemático monasterio de San Pedro de Soandres para continuar por el resto de las trece parroquias.
Uno de los problemas crónicos a los que se enfrentan los ayuntamientos de la Costa da Morte es la elevada dispersión poblacional y territorial. A Laracha suma más de 300 kilómetros de viales, 83 de caminos forestales y 32 hectáreas (equivalente a otros tantos campos de fútbol) de terreno. Nada comparado con Carballo, donde el edil de Obras, Luís Lamas, estimó que entre viales asfaltado y con zahorra «suman 1.200 quilómetros» de red, el equivalente a la distancia, en línea recta, entre A Coruña y Barcelona.
En muchos casos se da la circunstancia además de que cuando se ha completado la primera fase de la limpieza ya hay que volver a pasar la máquina porque la hierba volvió a crecer. Así lo apuntó el regidor zasense, Manuel Muíño: «Xa limpamos nas parroquias de Carreira, Gándara e Lamas e cando rematemos polo resto teremos que empezar de novo porque a herba xa medrou moito». Y argumentó: «O bo tempo das últimas semanas e as choivas dos últimas horas facilitaron o crecemento da herba». Algo similar esgrimió el cabanés, José Muíño: «Nós xa rematamos a primeira fase da limpeza, completámola por todas as parroquias, e agora, entre finais de xuño e principios de xullo daremos unha nova pasada para deixalo todo limpo». El concejal de Obras de Carballo, Luís Lamas, señaló que es ahora el momento ideal para iniciar los trabajos de desbroce y limpieza: «Se cortas a maleza en marzo ou abril volver a medrar con moita facilidade. Agora é a mello época porque está mis seca e é mais complicado que creza con rapidez».
Una de las prioridades que se fijan los gobiernos en funciones es dejar todo listo para las celebraciones de las fiestas locales, patronales o parroquiales.
Los concellos recurren a las empresas privadas para acelerar los trabajos
Los concellos de la Costa da Morte solían recurrir a los planes de empleo promovidos por la Diputación y la Xunta para contratar a los brigadistas de obras y limpieza. En otros casos también se apostaba por personal propio. Pero dada la lentitud con la que se ejecutaban estas labores y el enorme territorio a cubrir la mayor parte de los consistorios han apostado claramente por la externalización de parte del servicio.
En Carballo son dos empresas las que acometen gran parte del trabajo, en colaboración con personal municipal. En A Laracha, el equipo de gobierno licitó el servicio en cinco lotes. Tres de ellos para la limpieza viaria en las 13 parroquias, un cuarto lote se adjudicó para el desbroce de caminos forestales, y el quinto, parcelas y terrenos de titularidad municipal. La inversión prevista por el Concello de A Laracha ronda los 140.000 euros.
En Coristanco, el alcalde, Juan García Pose, también apostó por la fórmula de la externalización para acelerar los trabajos.