Dani Lema: «Nomes en inglés, exercicios novos... A xente pensaba que estaba tolo!»

Antón Lestón Lago
antón lestón CARBALLO / LA VOZ

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ATLETAS DEL ATLÁNTICO | Hace diez años que él y Damián Espasandín crearon Dafit en Cee, un centro de entrenamiento que ha basado su éxito en la innovación y que ahora se expande con el crossfit como arma

10 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Como tantos otros en la Costa da Morte, Dani Lema (Laufen, 1987) es hijo de emigrantes en Suiza. Allí descubrió su pasión por los deportes. Primero por la natación y más tarde por el hockey sobre hielo, disciplina en la que estuvo federado durante dos temporadas. A los 14 años regresó con sus progenitores a Cee, donde no cesó en su empeño deportivo, ejercitando la musculación y la carrera, mientras que la mayoría de sus amigos se decantaban por el fútbol. No fue hasta el 2007 cuando conoció de primera mano el kickboxing, que desde muy pronto ocupó un espacio importante en su vida. «O contacto sempre me chamara a atención e, ademais, é un deporte no que avanzas moito ao principio. Entón, ao ver que se dá ben axuda á hora de motivarte. Iso, e a forma de impartilo por Antonio Blanco, Dache, que aínda segue a ser meu mestre e amigo, co que consulto ás veces, foron os motivos principais de que me atrapara tan rápido», explica.

Fue el kickboxing el que despertó su espíritu de docente, pues además de competir —fue subcampeón gallego y bronce nacional —, superó los distintos niveles y cinturones, lo que le sirvió para ayudar a su maestro. Empezó encargándose de la preparación física de los alumnos del club afincado en la Piscina Municipal de Cee y ya de aquella, en el 2010, elaboraba entrenamientos de «cross training» y al aire libre. Pasó entonces a impartir otras actividades como Body Combat o Body Pump en el gimnasio municipal, donde conoció más íntimamente a Damián Espasandín, monitor por aquel entonces. Con muchos intereses en común, acordaron poner en marcha el proyecto Dafit, un tipo de entrenamiento moderno y personalizado, que fue cogiendo adeptos. «Ofrecíamos un servizo novo, con adestramentos persoais nun baixo ubicado no cruce de Roget, con grupos de tres persoas como máximo e con preparacións para probas específicas», recuerda Dani.

Organizaron, además, rutas de senderismo y eventos al aire libre para dar a conocer la marca. «Cando pechou a piscina, rescatounos o Concello de Dumbría, que nos chamou para impartir actividades no Conco. Alí, para diferenciarnos, quixemos ofertar cousas novidosas, que non houbera na Costa da Morte», indica Lema. El crossfit, del que Dani había hecho el curso oficial, siendo uno de los pocos monitores que lo tiene en la zona a día de hoy, y el OCR (Carreras de obstáculos), fueron sus armas iniciales. «De OCR non había nada en toda Galicia, unicamente en Vigo, pero non para adestralo como en Dumbría. Foi unha bomba porque era unha parte exclusiva que engadía valor ás actividades máis tradicionais que xa tiñamos, como spinning ou pilates», dice.

Especialmente impactante fue la llegada del crossfit —un método registrado de entrenamiento y originario de Estados Unidos— a la comarca. «Eu descubrino facendo o curso de instrutor das MMA no Camm de Santiago, que era o único lugar onde tiñan un hexágono. Como a MMA xa vén de Estados Unidos, tamén tiñan todos estes adestramentos de crossfit. Chamoume moito a atención, comecei a practicalo e non dubidei en traelo para aquí. Montamos a xaula, compramos material e comezamos a introducilo, que daquela era moi difícil. Imaxina, nomes en inglés, exercicios diferentes... A xente pensaba que estaba tolo!», rememora.

Crecimiento y el covid

Dafit fue creciendo y creciendo. Llegaron hasta Carballo en el 2019, donde estuvieron impartiendo unos meses al mismo tiempo que encontraron el hogar perfecto en Cee. La antigua discoteca Slava, que no podría volver a abrir como sala de fiestas, ofreció el espacio ideal. Pero cuando todo iba sobre ruedas, llegó el pinchazo en forma de covid. Tuvieron que abandonar la capital de Bergantiños y reducir su plantilla, que llegara a ser de diez empleados y ahora es de cinco.

No obstante, lo importante es que han sobrevivido a todos los inconvenientes que se fueron añadiendo a la ya difícil misión de emprender en un municipio como Cee. «Apostamos polo mellor material e movémonos por moitos campos para ir probando e descubrindo cousas novas co obxectivo de innovar e diferenciarnos», analiza un Dani, que con Damián, han creado un nuevo paradigma de entrenamiento en la zona.

Influencia que ahora esperan ampliar a Santiago, pues vuelven a exportar sus servicios los lunes y los miércoles. No buscan lamentaciones, pues en su gimnasio esas solo tienen cabida en un pequeño cuenco para lágrimas que casi siempre está vacío.