Carballo se convierte en el primer concello de la Costa da Morte con un catálogo específico de hórreos

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana García

La medida es crucial para su protección y para las obras en su entorno

11 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Carballo ya tiene aprobado su catálogo de hórreos. La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda acaba de publicar en el Diario Oficial de Galicia su aprobación definitiva, tras un largo proceso para identificar cada uno de ellos. Son algo más de un millar (1.052), como ya se aprobó en un pleno a finales del 2020 de manera inicial (la provisional fue el año pasado), pero ha habido que esperar el visto bueno autonómico. Concluye así un largo trabajo muy anterior, iniciado en el 2019, para determinar cuáles son los cabazos que deben ser considerados como tales.

No es un tema menor, ya que en función de lo que se determine se requieren más o menos permisos para realizar obras, tanto en la misma construcción (de mantenimiento) como en su entorno. Los perímetros de protección no son los mismos si es un hórreo catalogado o no lo es, o si es un hórreo considerado bien de interés cultural (BIC), según la Lei de Patrimonio. Y eso afecta a todo lo que está al lado, desde una casa, a un galpón o una pista.

En el PXOM se incluían casi el doble, unos dos mil hórreos (2.109), así que la confección de este catálogo, analizando cada uno de ellos, elaborando su ficha correspondiente, los redujo a la mitad. No quiere eso decir que todos los que quedaron fuera no lo sean, sino que por su tipología o estado no merecen el mismo grado de protección. De hecho, en todos los PXOM aparecen reflejados los más significativos de cada concello, y los que no lo están se rigen por la normativa general de Patrimonio, lo que puede generar anomalías o discrepancias con la realidad. Carballo es el primer concello de la zona (no habrá muchos más en el resto de Galicia) que entra al detalle. En la orden de la Xunta de esta semana ya se explica que se «identifican os hórreos realmente existentes», descartando edificaciones auxiliares, y descatalogando «edificacións incorrectamente consideradas», y además ahora «cunha planimetría que defina axeitadamente os entornos de protección».

Los vecinos que deseen realizar obras o actuaciones de conservación podrán consultar cada una de las fichas, bien a través de la web o en la oficina técnica municipal.

Sofán y Rus, como parroquias más grandes (y con más núcleos de población, que es lo relevante), acaparan la mayor parte de hórreos. En la primera quedan como tales 155, aunque es obvio que tiene muchas más construcciones semejantes que realizan las mismas funciones de almacenamiento. Rus no le anda lejos: 136 en el nuevo catálogo de protección.

El catálogo también recomienda el uso de determinados colores en los arreglos o mantenimiento en los destacados, destacando el ocre o el amarillo.

las características

Hórreos de madera. De dos tipos: el Mariñán, con cámara rectangular estrecha y alta, corto y normalmente pequeño, sustentado en cepas, propio de As Mariñas, y tipo Bergantiñán, con cámara grande, ancho y voluminoso de sección rectangular, aunque corto, suspensión alta sobre cepas, y propio de Bergantiños.

Hórreos mixtos de piedra y madera. Son de tipo Carral, de cámara ancha y alargada, sobre cepas de cachote, pared de piedra y costal de madera; Carballo, similar al Bergantiñán, pero con piedra en las paredes menores, muy ancho y grande, y tipo Mahía, largo y estrecho.

Hórreos de piedra. Tipo San Pedro de Visma, rectangulares, anchos y bajos, con acceso por el penal; tipo Coristanco, parecido al anterior, con acceso costal, y tipo Fisterra, estrechos y altos,

Hórreos de ladrillo o cemento. Son de tipo Carballo, rectangulares, cortos y anchos.