Amistades y experiencias en una vida de fútbol

raúl díaz

CARBALLO

basilio bello

EN PRIMERA PERSONA | Escribe Raúl Díaz Carballeira, futbolista y ya excapitán del Sofán | Este deporte ha sido una forma de conocer gente en un ambiente sano. Colgadas las botas, me toca disfrutar de mi familia y hacerla disfrutar conmigo

08 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El 24 de abril se terminó para mí un camino que comenzó hace 35 años, cuando empecé a jugar al fútbol en el Olímpico de Rutis, y se cierra con un ciclo que se abrió hace nueve temporadas, cuando decidí fichar por la SD Sofán. El motivo que me llevó a fichar por este club fue tener la oportunidad de jugar la Liga y la Copa da Costa, de las que tantas veces había escuchado hablar sobre ella en cuanto a intensidad, gente en los campos de fútbol animando cada partido al equipo de su localidad... Lo vivido desde que llegué a la SD hasta hoy supera con creces todo lo que podía haber esperado, tanto personal como deportivamente. Me encontré un club ejemplar, una afición por el fútbol, amor por unos colores, comunión entre todas las instancias del club, sensación de estar en una familia en la que todo aquel que entra sale perteneciendo a ella… y podría seguir así durante líneas y líneas. Por esta familia y por sus colores y escudo, he tratado de dar el 200 % y aportar mi granito de arena cada vez que salía al campo y, entre todos y con el esfuerzo de todos, hemos conseguido cosas maravillosas y éxitos impensables.

Del Sofán me llevo tres ascensos en tres promociones de infarto contra rivales que nos lo pusieron realmente difícil. Remontada épica en una tarde mágica con un 5-2 en el marcador ante el Val do Ulla, en el minuto 97, después de comenzar perdiendo 0-2 y tener que ganar por diferencia de tres goles para poder ascender a 1.ª Regional. Remontada, no menos trascendente, pero no tan espectacular, contra el Miño, en su propio campo, cuando se ponen por delante 1-0 en el partido de vuelta, consiguiendo marcar dos goles para certificar el ascenso a Regional Preferente, después de haber empatado 0-0 en la ida. Y, ni que decir tiene, el ascenso en el partido contra el Boiro en la promoción de ascenso a 3.ª RFEF, que todos recordaremos porque fue un partido para la historia y de la que tuve suerte de participar anotando el 1-0 que permitió abrir el camino.

Como único trago amargo, aunque una magnífica experiencia por lo vivido en el campo, me quedará la final de la Copa da Costa frente al Xallas, que debería haber sido nuestra y que se nos escapó en la tanda de penaltis, aunque estoy seguro de que no tardará en llegar a las vitrinas del club.

Fuera de los éxitos deportivos me quedo con la sensación cada vez que saltábamos al campo de O Carral y con el calor de la afición, campo donde se han vivido partidos para el recuerdo y remontadas épicas, además de la ya mencionada del Val do Ulla, saber que en nuestro campo todo era posible y que los rivales también eran conscientes de ello. Como no podía ser de otra forma, me llevo el haber podido jugar con mi ahijado durante tres temporadas. Ha sido algo que recordaremos, tanto yo como mi familia (que es muy futbolera y que nos seguía a todos los campos de Galicia) durante el resto de nuestras vidas.

basilio bello

Lejos de lo meramente deportivo, del fútbol me llevo amigos y amigas y experiencias vividas con todos ellos, tanto deportivas como personales. En todos aquellos equipos en los que he estado, Olímpico de Rutis, Deportivo, Imperátor, Vizoño, Silva, Caión y Sofán, he hecho grandes amistades que perduran durante el paso del tiempo y lo harán durante muchos años.

Pero no solo puedo hablar de equipos federados. El fútbol, en sus otras facetas, me ha llevado a disfrutar de amistades y vivir experiencias con muchas personas que poco o nada tienen que ver con el fútbol federado, pero sí relacionadas con él. Desde amigos del Instituto Monelos, con los que me juntaba cada día para jugar en la Plaza de Pablo Iglesias en A Coruña, cerca de donde vivía de pequeño, hasta mis amigos de Guitiriz, con los que me pasaba todos los veranos jugando al fútbol desde que amanecía hasta que anochecía.

El fútbol ha sido una forma de conocer gente en un ambiente sano y del cual han salido mis mejores amigos. Colgadas las botas, me toca disfrutar de mi familia y hacerla disfrutar conmigo, tratando de devolver a mis hijos y a mi pareja todo el esfuerzo que han tenido que realizar, que ha sido mucho, para que yo pudiese cumplir mis sueños y seguir mi pasión, y me tocará vivir desde la grada los éxitos que el Sofán seguirá cosechando. Este equipo, con la humildad, el sacrificio y amor por el escudo con el que trabajan, seguirá recogiendo sus frutos durante muchos años. Estoy convencido de ello y los disfrutaré dando a mis amigos desde fuera el aliento que ya no podré dar desde dentro del campo.

basilio bello

Para terminar, estaré siempre agradecido a la SD, a su directiva, a su afición y a mis compañeros de vestuario y del cuerpo técnico, con los que he compartido todos estos años, por lo vivido, y debo darles las gracias por la despedida que me han hecho. No soy capaz de explicar lo sentido, pero ojalá todo jugador o jugadora del fútbol modesto tuviese la oportunidad de vivir lo que yo he podido vivir. Ha sido un día inolvidable, una despedida soñada. Ha sido de esas cosas con las que desde niño sueñas y de mayor siempre recordarás con una sonrisa y con emoción.

Dni

Raúl Díaz Carballeira. El sábado, este coruñés cumplió 43 años, edad a la que se ha retirado del fútbol, tras pasar nueve temporadas (desde el verano del 2013) en el Sofán, equipo con el que subió a Tercera desde la Liga da Costa, un largo período de más de 300 encuentros en el que ha anotado más de 140 goles y ha vivido tres ascensos. Con el Sofán ha disputado su única temporada en la liga nacional, en una larga trayectoria futbolística que lo ha llevado por varios equipos herculinos y, en la comarca por el Caión antes quedarse en O Carral. Además de futbolista, es director del colegio e instituto Hogar Santa Margarita de A Coruña, donde da clases de Economía.