Arancha Mañas: «Hay que lograr que la gente recicle al máximo, desde un envase al aceite»
CARBALLO

ECOVOZ 2022 | Al frente de la entidad APROEMA, subraya la importancia de concienciar a los ciudadanos sobre su responsabilidad en la gestión de residuos
14 feb 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Está al frente de la Asociación Profesional de Empresas Medioambientales (APROEMA). Arancha Mañas insiste en la colaboración público-privada, en la necesidad de estrechar lazos y en los beneficios de crear sinergias para lograr la excelencia de la gestión medioambiental. «Todas las empresas, tanto los gestores de residuos como los productores, hoy en día, tenemos que ir de la mano. Hace unos años parecía que el medio ambiente era una cuestión de la empresa que gestionaba los residuos o una manera más de valorizar los excedentes», dice.
—Afortunadamente, hoy en día, los términos han cambiado.
—Efectivamente, en este momento, cuando hablamos de economía circular y sostenibilidad, estamos aludiendo a algo que nos llega a todos los ciudadanos como generadores de residuos, pero también a los gestores. En nuestro caso, tenemos que ir de la mano, sin olvidar que todo empieza en el momento en el que se producen los residuos y con el que pone esa materia prima en el mercado. Cualquiera programa gubernamental, proyecto de reconversión o ayuda, hoy en día tiene que tener en cuenta esa realidad.
—Claramente el escenario ha mudado. ¿También los desafíos?
—Los gestores o empresas de medioambiente no solo tienen que ver esos residuos que le llegan o esos en los que ha volcado toda su investigación y sus técnicas. Tienen que mirar claramente hacia el consumidor porque ahora los gestores también hacemos concienciación para que la gente sepa cómo tiene que separar y gestionar los residuos.
—¿Por qué nuestros gestos son tan importantes?
—Porque de eso dependerá que nosotros después podamos valorizar lo máximo. Por eso, nuestro futuro está mucho en la concienciación, no podemos olvidar que parte de nuestra responsabilidad está ahí. El gestor tiene que tener muchas sinergias con el productor. En definitiva, hablamos de la economía circular, de que todo vaya utilizándose hasta que se agote. Hay que lograr que la gente recicle lo máximo posible, por ejemplo, los envases que llegan a su casa, o el aceite usado. Ese que no tiene que acabar derramado por el vertedero. Los ciudadanos tienen que saber que, en cierta manera, todo eso le va a volver. Bien en una pecha para la ropa, en otro envase o el aceite en un biocombustible o en otra materia. La clave es tener claro que, como te va a acabar volviendo, tienes que dejarlo en el mejor estado posible
—La asociación que preside echó a andar en el año 97. Desde entonces, ¿cómo ha cambiado el perfil de las empresas del sector?
—A día de hoy tenemos asociados a nivel internacional, pero el rango va de los más pequeños a los más grandes. Todos vamos en la misma dirección, los intereses y la lucha es la misma. Sentamos a FCC o a Ence con otras firmas más pequeñas y eso nos aporta sinergias muy enriquecedoras.
«En Galicia hay mucho que premiar, buenas prácticas desde colegios a pymes»
En el 2012, Aproema lanzó sus propios premios. Unos galardones que han reconocido el trabajo en favor de la concienciación medioambiental de diferentes centros educativos, de empresas como El Corte Inglés, así como de la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre por el éxito y la extensa trayectoria de su programa Voz Natura.
—Sus premios son un buen termómetro para medir cómo se están haciendo las cosas en Galicia. ¿Sacamos buena nota?
—En Galicia hay mucho que premiar. Llegó un momento el que veíamos que se hacían muchas cosas, bien hechas y no se conocían. Muchas buenas prácticas que quisimos premiar, desde colegios hasta pymes, así que desde entonces reconocemos la formación y también la innovación. Son tantas las iniciativas que es difícil elegir y por eso hemos creado diferentes categorías. Queremos visibilizar el buen hacer que hay, desde la innovación hasta la docencia.
—¿Les ha costado mantenerse como una voz común?
—Llevamos más de 20 cambios legislativos, pero conservamos ese objetivo de tener voz común. Y buscamos la cooperación con la administración pública porque no deja de ser el ente que nos regula. Siempre hemos intentado poner nuestro grano de arena porque creemos en esto y lo hacemos desde la experiencia.