«Moitos pacientes adultos que vemos na unidade de Saúde Mental non foron tratados sendo nenos ou adolescentes»

Pablo Varela Varela
pablo varela CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana Garcia

En el área de Psiquiatría del hospital de Cee constatan un aumento de la demanda de consultas: un 15 % por mes en comparación con el año 2020

21 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

En la era de lo superficial, la del corpore sano llevado quizá al extremo, emerge el cuidado del otro concepto que completa la fórmula. Algo tan humano como sufrir un bache emocional, incluso una depresión severa, sigue guardándose bajo llave en las mentes de los afectados. Beatriz Ferreiro, especialista adscrita al área de Psiquiatría en el hospital Virxe da Xunqueira, apunta dos posibles causas: «Cando os pacientes veñen á consulta e relatan que levan mal xa moito tempo, teño por costume preguntarlles os motivos de que tardasen tanto en pedir axuda. En moitos casos, porque temían atoparse cun profesional serio e pouco empático. Outros explican que lles custa expresarse, e gardan todo o sufrimento ata que rompen e xa non poden máis, acudindo acompañados de alguén do entorno, sexa familia ou amigos».

Romper con ese temor, en ocasiones, es algo que se produce a través de la experiencia de un conocido. De personas que ya padecieron problemas similares y dieron un paso adelante para aproximarse a una especialidad, la Psiquiatría, «que é unha especialidade máis», pero aún rodeada de ciertos estigmas sociales que pueden frenar a algunos pacientes cuando se sienten con fuerzas para exponer su caso.

Durante el primer estado de alarma por la pandemia de coronavirus, diversos especialistas sanitarios avisaron de que, con el tiempo, se podrían ver las consecuencias del confinamiento y la pérdida de relaciones sociales. Ferreiro señala que, efectivamente, «hai un aumento en canto á demanda» de consultas relacionadas con el impacto de cuestiones como, por ejemplo, aquel primer encierro que, para muchos, fue entre cuatro paredes.

Según las cifras facilitadas por el Sergas, el servicio de Psiquiatría del hospital de Cee atendió una media de 36 primeras consultas mensuales por salud mental durante el año pasado. En el actual, tras la fase aguda de la pandemia, esa cifra se ha incrementado a algo más de 41. Es decir, un 15 % más por mes en comparación con el mismo tramo del curso anterior.

A la Unidad de Salud Mental del Virxe da Xunqueira acuden, entre otros, vecinos de la Costa da Morte ya en edad adulta y cuyos problemas psicológicos hunden sus raíces muy atrás en el tiempo, incluso en la más tierna infancia. «Moitos casos que vemos na consulta, asociados a maiores, foron porque precisamente non foron tratados cando eran nenos ou adolescentes», detalla Ferreiro.

La atención a los jóvenes

Hay, en todo caso, un avance en clave positiva: las nuevas generaciones parecen haberse alejado de esos estigmas que atenazaban a los más mayores. «Resúltame moi grato ver como os nenos e adolescentes que veñen á consulta ven como algo natural o feito de vir á Unidade de Saúde Mental. Incluso o comentan co seu entorno, e algúns deles comparten as súas experiencias con naturalidade».

Llegar a este punto de ruptura no ha sido sencillo, pero aún hay mucho camino por recorrer. Entre otros motivos, porque la aparición de las redes sociales también cambió la forma de comunicación y consumo de los más jóvenes, receptores de infinitos tipos de influjo y contenido. «Afortunadamente, as novas xeracións contarán con máis ferramentas no manexo da intelixencia emocional, de aí a necesidade da prevención en canto á saúde mental infanto-xuvenil. E, por sorte, actualmente aprobouse a especialidade en España», expone Ferreiro.

«Acudir ós especialistas de Psiquiatría non fai ás persoas máis fráxiles nin moito menos máis débiles»

Beatriz Ferreiro se formó en países como el Reino Unido, Suiza y, finalmente, Francia, donde estuvo trabajando estos cinco últimos años. En todos ellos tomó nota de cómo se atendía o se avanzaba hacia la puesta en marcha de áreas sanitarias específicas orientadas al cuidado de la salud mental. «Con respecto a outros países da Unión Europea iamos con moito retraso. En Francia fun testemuña do impacto que ten o feito de contar con unidades de Psiquiatría Infanto-Xuvenil e especialistas formados para previr que certas patoloxías se cronifiquen», cuenta.

Con el paso de los años, además de los avances en investigación, en España también se han ido quedando por el camino los prejuicios. Ferreiro señala que, cada vez más, «a xente é consciente da necesidade de acudir a este tipo de especialistas e que facelo non fai ás persoas máis fráxiles nin moito menos máis débiles».

Para ella, normalizar que Psiquiatría se trata de una especialidad más, como lo son Cardiología o Dermatología, es un factor clave, porque al fin y cabo supone una valoración indispensable y beneficiosa para el paciente. «Se Psiquiatría existe é porque é necesaria e porque hai unha demanda. Precisamente, coa pandemia, estamos vendo á importancia que ten a saúde mental na sociedade e as nosas vidas», agrega.

El Plan de Salud Mental

El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, expuso ayer en el CHUS que la Xunta prevé incrementar en 4,4 millones de euros la inversión en salud mental en el proyecto de presupuestos para el año 2022.

A día de hoy, según el gobierno autonómico, ya se ha incorporado al 80 % de los nuevos profesionales previstos para los dos primeros años de vigencia del Plan de Salud Mental, que contempla el período 2020-2024. Son, por ahora, 96 especialistas de los 120 que la Xunta estima incorporar a mitad del plan. Entre ellos hay, por el momento, 31 psicólogos y 31 psiquiatras, así como 12 trabajadores sociales y 18 enfermeros especialistas en salud mental.

En este sentido, uno de las metas marcadas inicialmente por Sanidade fue la puesta en marcha de dos unidades de Saúde Mental en el área sanitaria de A Coruña y Cee, dentro del objetivo de incrementar el número de recursos de asistencia sanitaria ambulatoria.

En el caso del hospital Virxe da Xunqueira, fuentes sanitarias aseguran que ya se está trabajando en la disposición de esta unidad específica.