Directivos y aficionados se volcaron con el campo de fútbol del Corme CF
18 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El campo de fútbol de O Cairo luce un aspecto muy distinto a antes de la llegada del covid. La pandemia animó a directivos y aficionados a darle un lavado de cara. El resultado, una auténtica obra de arte.
La idea surgió como un entretenimiento para pasar el tiempo dadas las restricciones que el virus impuso. Ahora ya es un vicio, aseguran los protagonistas de lo que fue un cambio total de aspecto.
Andrés Veres, Eduardo Cambón, José Suárez, Quini; Jesús Pailos... la lista aún sigue. Se trata de marineros de la mercante, en la inmensa mayoría, jubilados, aunque cualquiera lo diría, pues entienden de todo. Electricidad, fontanería, carpintería, albañilería... Han hecho una auténtica reforma en las instalaciones municipales, tanto en el interior como en el exterior, si bien estas últimas son las más llamativas.
Fieles a la cultura marinera de este pueblo pontecesán, pintaron un mural del Faro do Roncudo en el muro exterior, así como el nombre del estadio acompañado por los símbolos del escudo. Mesas, bancos, una barbacoa y hasta piedras que imitan menhires decoran el perímetro del campo por fuera. Y es que ahora la entidad dispone de un merendero, que está a disposición de todos los que se acerquen hasta allí.
Más detalles hay en la cantina, con varios escudos creados de distinta manera. Las gradas, ahora, también lucen el nombre del club en las butacas.
Estos manitas también hicieron unas estanterías en los vestuarios para que cada jugador coloque su botella de agua entre otros enseres. Y los trabajos no terminan aquí: llevaron a cabo la canalización de las aguas pluviales en la zona de las duchas, pintaron todo el perímetro del campo y otros muchos espacios; pusieron plaqueta en numerosas superficies y poliestireno y azulejos en varias paredes; arreglaron el tejado de los vestuarios... Aprovecharon, también, para limpiar de maleza los alrededores del campo.
Fueron muchas más personas las que colaboraron con estas obras aportando material. Desde empresas a vecinos y el propio Concello. Ahora bien, el club ha tenido que hacer un gran desembolso (hasta 12.000 euros) en la compra de puertas y la contratación de hormigoneras, principalmente. La inversión y las ganas por mejorar aún continúan.
Botas de fútbol para los jugadores y regalos para los entrenadores: así son sus valores
En el Corme CF presumen de gozar de una buena salud económica gracias al aliento de su afición (cerca de medio millar de socios) y a los valores que tienen consagrados desde su fundación, que básicamente pasan por cuidar y mirar por la gente de la casa para no verse obligados a tener que pagar sueldos. Es llamativo, cuando no debería de serlo, este buen trato que brindan a su gente. A los jugadores les compran hasta las botas de fútbol -nada baratas, por cierto-, y tienen varios detalles con ellos a lo largo de la temporada, como un décimo de lotería de Navidad. Por otra parte, a los entrenadores les hacen regalos hasta para sus mujeres. En estos pequeños gestos está el secreto de su éxito.