La Costa da Morte conservó la esencia del fin de semana más festivo del año

Patricia Blanco
patricia blanco CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Buena respuesta a las programaciones de la Xunqueira de Cee, A Laracha o la Mostra de Buño

16 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

«Despois de case dous anos nesta situación, a xente ten moita gana de saír da casa». Fran Gorín, nuevo presidente de la Asociación Oleira de Buño, explica con estas palabras la afluencia que vieron en la 37.ª Mostra da Olería en momentos que, generalmente, no solían ser muy concurridos, caso del día de la inauguración, jueves: «Esa foi a nosa vara de medir máis grande, porque foi un día forte de vendas». A falta de un balance más global, indicaba ayer por la mañana, cuarta y última jornada del encuentro, que, en general, están contentos. «En liñas xerais, foi ben. Podería haber máis xente, pero non nos queixamos. Ao facer bo, moitos elixen a praia». Buño no es demasiado grande y la actividad está ubicada en un sitio estratégico, de forma que la gente que acude al entorno de la iglesia, a las casetas o actividades, también pasa por las tiendas de los alfareros, en las que, aunque todavía no se ha hecho una valoración entre todos, hubo bastante movimiento. Incluso en aquellas algo más alejadas, a las que también se procuró llegar situando estratégicamente propuestas como la actuación de la artista Guadi Galego, ayer, plato fuerte del programa. Con un aforo de 250 personas, 200 plazas ya estaban reservadas por la mañana y contaban con llenar capacidad.

Concierto de Guadi Galego en la Mostra de Buño
Concierto de Guadi Galego en la Mostra de Buño BASILIO BELLO

Este 2021, como el 2020, Laxe tampoco tendrá Recreación do Naufraxio. Ni el «quince», que fue ayer, tuvo nada que ver con el de otros años. De hecho, la programación cultural del fin de semana fue aplazada por el Concello, por prevención ante la escalada de positivos. Laxe está desde el sábado en el nivel alto de restricciones, pero aun con todo esto, mucho de espíritu de agosto hay. Sería este, a nivel gallego, y en la comarca también, el fin de semana más festivo del año, con algunas de las citas más potentes. Muy comedidas y limitadas por la pandemia, pero aún así se ha conservado la esencia. «Vese que a xente tiña ganas de terraza. Á unha menos cinco teslle que ir dicir que hai que levantar. Ambiente hai, só nos falta a orquestra na praza», decían ayer, precisamente, desde O Náutico de Laxe.

Ikigai, en la Praza Olonne Sur Mer larachesa
Ikigai, en la Praza Olonne Sur Mer larachesa BASILIO BELLO

Calan esos mensajes de que la fiesta se lleva dentro. También arrancaron el viernes las patronales de A Laracha, pero sin verbenas ni modos de celebración prepandémicos. El Concello diseñó una programación que comenzó con Títeres Alakrán y su Circo Galaico. El hecho de ser necesario reservar entrada previamente permite saber a ciencia cierta la asistencia, y para este espectáculo se habían anotado 180 personas. Faltaron algunas, porque el viernes por la tarde lucía el sol y seguramente alguien prefirió el mar, pero son cifras que, desde luego, acreditan lo que dice Andrea Rodríguez, dinamizadora cultural larachesa: «La gente tiene ganas de normalidad y se ve muy animada». Lo asegura, por ejemplo, por las doscientas y pico personas que disfrutaron el sábado del concierto de Susana Seivane, al aire libre, en la Praza Olonne Sur Mer. La gaiteira llamó a «coidarse», para salir cuanto antes de la «pesadilla». Agradeció al público su calidez («un pracer sempre visitarvos») e incluso sorprendió con la intervención de uno de sus hijos para la Muiñeira de Chantada. Ayer, había anotadas 200 personas para las acrobacias de SU.MA (espectáculo Ikigai) y otras 180 para el monólogo de Pepo Suevos. Lo dicho, limitada, pero esencia festiva.

BASILIO BELLO

Una procesión en filas y con nuevo recorrido en Cee, pero pese a todo «moi emocionante»

Al igual que Carballo, Fisterra, Malpica y Laxe, también Cee está en nivel alto de restricciones. Allí tienen en marcha desde el viernes las «non-festas» da Xunqueira. Non-festas porque no son las de antes del covid, sino un programa cultural impulsado desde el Concello para que, pese a todo, sean unos días «especiais». Lo están siendo. Fue ayer uno de los más grandes, el de la Virxe, la patrona, la primera procesión, en cuya organización se implicó el consistorio este año. Se varió el recorrido para evitar calles antiguas más estrechas, y se hizo por filas, en un tramo de la Alameda y, después, la zona del Recheo. Casi una hora. «Emocionante», dice el técnico de Cultura, Víctor Castiñeira. Asegura que esperaban gente, pero no tanta, mucha más que en el 2020. Sabían que era «un acto difícil», porque las procesiones de estas fiestas siempre suelen ser multitudinarias, pero salió bien. Ayudaron colaboradores parroquiales, Protección Civil, Policía Local y voluntarios municipales. Ante centenares de personas actuó, de otro lado, la Banda de Cee y, a media tarde, aguardaban ya por Lo Mejor del Último y los simbólicos fuegos de la noche. «A xente ten gana de festa, de saír, xa non só en Cee, en toda Galicia», cree Castiñeira. Con normas, claro.

Hoy, San Roque

Último día de la Xunqueira en Cee, hoy por el copatrono San Roque. El programa es variado. Hay misas a las 10.00, 12.00 y 21.00, además de procesión a las 11.00. La Charanga O Rumbo hará un pasacalles por la mañana y actuará a las 13.30 en la Praza Domingo Antonio de Andrade. A esta hora lo hará también la Banda de Padrón, en la Praza da Constitución. Cabezudos y Viqueiras de Ordes se verán a las 18.15 y 20.15. Finalmente, a las 22.00, en la Praza 8 de marzo, intervendrá el gaiteiro Óscar Ibáñez con su Tribo, y con varios invitados locales.