El sector turístico de la Costa da Morte capea el covid y espera un agosto pleno de ocupación
CARBALLO
Después de un julio bueno, las previsiones también lo son, según confirman profesionales consultados. El Camiño, de otro lado, va a más
31 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El mes de julio deja buen sabor y agosto trae muy buenas expectativas. A nivel turístico, la Costa da Morte está capeando el covid-19 y el mes que arranca mañana se presenta, al menos hasta pasada la primera quincena, pleno de ocupación. «Nós, ata o día 20, estamos ao 100 %. Xa dende que abrimos, na ponte das Letras Galegas, foi algo sen parar, non baixamos nunca do 70 %, salvo algún día puntual», indica Silvia Bouzas desde el hotel Playa de Laxe. En su inmensa mayoría, aunque testimonialmente llegó algún americano, francés, portugués o alemán, es turismo nacional. También será agosto para el turismo rural. En Casa de Lema, Muxía, tienen lleno hasta el día 20, indica Jesús Lema, directivo además de la entidad Muxía Natural. Cree que la situación es generalizada, y que la ocupación «vai ben», pero remarca que los huéspedes «van moito enriba da hora». Esto es, están pendientes de los cambios de restricciones en los concellos: llaman y consultan, por ejemplo, si en este municipio tienen que entregar certificado de vacunación o similar. «O certo é que, con esta situación, todo pode cambiar da noite para a mañá», indica. Reporta asimismo ese peso del turismo nacional: «O estranxeiro poida que represente sobre o 1 %».
La tranquilidad, el sosiego, la conexión con la naturaleza y con las raíces que tan bien funcionan en complejos como Casa de Trillo, Muxía, son parte de los motivos que atraen a visitantes a una comarca que se ha postulado como destino seguro. «Sendeirismo, gastronomía, distancias ou bo trato» son las justificaciones que le llegan a Jesús Picallo de los visitantes cuando le explican por qué eligen la Costa da Morte. «A pesar da situación, seguimos sendo cabalo ganador», dice el presidente de Solpor, entidad de empresarios del Camiño a Fisterra y Muxía; vicepresidente del Clúster de Turismo de Galicia y, además, responsable del emblemático O Semáforo, en Fisterra. Asegura que agosto se presenta bien, «moi decente en ocupación», pero les preocupa el tiempo. Lo condiciona todo. No se ha anunciado un agosto de mucha calor, aunque también hubo días de julio con previsión de lluvia que después lucieron «espectaculares».
Así, y pese a lo variable de la incidencia del virus, pese a los protocolos tan estrictos que han de seguir restaurantes, hoteles u albergues, y pese incluso «á competencia desleal» que sigue habiendo a nivel de alquiler de pisos «que xeran turismo, pero non postos de traballo», dice Jesús Picallo que el turismo de la Costa da Morte es «optimista». Triunfan los alojamientos singulares, con un plus, ya sea por la parte del encanto o de su ubicación, de la sostenibilidad o, también, de su cocina. Vuelan las cabañas de A Torre de Laxe, por ejemplo, y están tirando mucho los productos de calidad y locales que cocinan y sirven en LiresCa (Lires, Cee), una casa de labranza que guarda asimismo espacio para el arte. El estómago suma experiencia, como comentaba estos días Álvaro Rodríguez, desde el restaurante A Lonxa d’Álvaro. Trabajaron este mes de julio a niveles de agosto del año pasado.
Actividades y eventos que tiran
Propuestas culturales como las que ofrece el dolmen de Dombate, o como el particular pedalOpiano, piano flotante, que ayer pudo verse en O Ézaro, Dumbría, dentro del ciclo Propulsa dela Xunta, tiran del interés. «Interesouse moita xente por esta cita, tanto por teléfono como vía redes», decían desde la oficina de turismo dumbriesa sobre el espectáculo de Le Piano du Lac y La Xata La Rifa, que pese a las incidencias técnicas iniciales, por la fuerte corriente, finalmente pudo llevarse a cabo.
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Hablan en Dumbría de mejores registros que el año pasado: «Se a cousa segue así, será unha boa tempada». Fuera de la temporada alta, Picallo alude a la importancia del turismo de eventos, algo que trabajan desde Solpor y el Clúster: por ejemplo, la primera edición de Kilómetro cero, ruta ciclista desde Madrid a Fisterra: traerá a finales de septiembre a unas 200 personas a la comarca. Tantean también convenios con el turismo de cruceros.
Peregrinos en tendencia ascendente y un Camiños dos Faros que atrae cada día
A fecha de 23 de julio, en Fisterra se habían entregado este mes 1.472 fisterranas, cifra muy superior a las 729 de todo junio. La presencia de peregrinos en el Camiño de Fisterra y Muxía va en tendencia ascendente, aunque sea de forma lenta y con registros que aún están muy lejos de los que se daban antes de la pandemia, como indica Jesús Lema desde Muxía. Septiembre y octubre suelen ser meses de mucho movimiento en la ruta, y así lo aguardan también para este 2021.
El Camiño dos Faros, de otro lado, sigue siendo otro de los puntales en la comarca. En el hotel Playa de Laxe reciben senderistas «todos os días», y eso pese a lo que ha llovido y a la maleza en el trazado, según le trasladan como queja a Silvia Bouzas: «Co que choveu, e logo o sol... onde limparon xa non se nota e onde xa non limparon...». Otro caballo de batalla es la señalización. Bouzas echa en falta más implicación municipal con un recurso que genera tanto movimiento y que, en temporada baja, resulta vital para el sector: «Dende os Concellos ven pasar os mochileros todos os días».