La media mensual por alquilar un piso turístico en la Costa da Morte oscila entre 1.200 y 1.500 euros

Marta López CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana Garcia

Fisterra y Laxe son los destinos favoritos de los viajeros, pero la demanda empieza a dispararse en la zona de Canduas y Neaño

19 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Una media de entre 60 y 90 euros cuesta pasar una noche en un piso de alquiler vacacional en la Costa da Morte. Los más exclusivos, los que están en primera línea de playa, los que tienen varias habitaciones o los recién reformados pueden subir incluso hasta los 100. A la infraestructura hotelera, las casas rurales y las viviendas unifamiliares, se suma una vasta oferta de apartamentos turísticos. Basta con hacer una simple búsqueda en cualquier portal inmobiliario para encontrar infinidad de ofertas y precios.

Piso de tres habitaciones en Laxe: 50 euros por noche y 750 la quincena. Otro de dos cuartos, también en Laxe: 350 euros por semana en julio y 400, en agosto. Apartamento de tres habitaciones en primera línea de la playa Langosteira, en Fisterra: 50 euros por noche. Y otro en la zona de San Roque: 500 euros la quincena en septiembre, porque antes está todo agotado. En la Anchoa se ofertan a 75 euros la noche, mientras que en pleno casco urbano de Ponteceso, a 90 por dos habitaciones y otros tantos cuartos de baño.

Para un mes completo -en caso de haber disponibilidad- los precios oscilan bastante en función del número de plazas que tenga el piso y de la ubicación, pero la media no baja de los 1.200 o 1.500 euros. En Costa Galicia, especializados en alquiler de temporada, ya no tienen nada que baje de los 2.500 mensuales en Fisterra, pero sí ofertan opciones por 1.550 en Corcubión.

Nuevos anuncios afloran cada día mientras las opciones van escaseando para los más rezagados. «Esta tempada andaremos polo 90 ou 95 por cento de ocupación», dicen desde la inmobiliaria Elías de Baio, «este ano, en xeral, a xente planificou as vacacións un pouquiño máis tarde pola incertidume do estado de alarma e polas restricións. Antes, xa en febreiro ou marzo estarían comezando as reservas, ou mesmo dun ano para o outro no caso dos viaxeiros frecuentes», añaden.

Cabana gana popularidad

Laxe y Fisterra son las zonas favoritas de los visitantes, aunque hay otras, como el área de Canduas, Neaño y Cesullas que está experimentando un repunte importante, «na busca, sobre todo, de tranquilidade e de menos aglomeracións», refieren desde la inmobiliaria baiesa. También en Ponteceso, Corcubión o Muxía hay bastante oferta, aunque en este último caso, sobre todo, de viviendas rurales.

Tampoco les va nada mal a los responsables de A Casa da Reina, un complejo de cuatro apartamentos en Nemiña que abrió en Semana Santa y que tiene todo completo hasta mediados de septiembre. Hasta ahora, explica Cristina Santamaría, la responsable, han recibido a huéspedes en estancias cortas, de tres o cuatro días, pero a partir de esta semana «serán máis longas, dunha semana ou mesmo de dúas», dice.

Escasez en otros puntos

Y si en localidades costeras, a priori, no hay problema en encontrar alquiler de temporada o por períodos cortos de tiempo, en otros puntos de la Costa da Morte se hace más complicado. Es el caso de Carballo, como indican desde la inmobiliaria Chus Arán: «Hai unha gran carencia e xa non só en canto ás vacacións. Hai traballadores que chegan aquí por pouco tempo, como mestres, mecánicos ou outros profesionais que veñen cumprir algún encargo, e non atopan nada para estancias curtas. Ao mellor chegan para unha substitución de quince días e váiselles o soldo nunha pensión», indican, al tiempo que reconocen que sería una buena inversión y «unha boa oportunidade de negocio» que supliría una carencia manifiesta en Carballo.

Tarjeta #QuedamosenGalicia

Hasta el 15 de diciembre podrá gastarse la tarjeta #QuedamosenGalicia, una iniciativa puesta en marcha por Turismo de Galicia para la reactivación económica del sector que arrasó nada más ponerse en circulación. Quince alojamientos de la Costa da Morte con oferta de apartamentos se adhirieron a esta campaña: Cabañas de Lires y Cabanas da Ría (Cee), A Parada da Pescadería, Apartamentos Vida Muxía, Playa Cruz Apartamentos y Praia do Capitán (Muxía); Cabañas Fisterra y Apartamentos Vida Fisterra, Apartamentos Vida Corcubión, A Casa da Canle y Casa da Fontenla (Vimianzo), Casa dos Caseiros y Apartamentos Playa de Osmo (Corme), Cabanas Narea (Laxe) y A Casa da Estrella (Canduas).

Denuncian el arrendamiento de apartamentos de Carballo para el ejercicio encubierto de la prostitución

Terceros o cuartos sin ascensor, antiguos, con poca salida entre quienes buscan vivienda, poco atractivos y propiedad, en muchos casos, de personas vulnerables que necesitan un ingreso extra a final de mes. Este perfil de apartamento se ha convertido en el escenario habitual para el ejercicio encubierto de la prostitución en Carballo, según denuncian desde una inmobiliaria local.

Ellos ya pusieron en conocimiento de la Guardia Civil un incidente que vivieron en carne propia y que empezó con varios individuos presentándose en sus instalaciones para el alquiler de un piso. Llegaron avalados con nóminas, con toda la documentación requerida y, a priori, nada les hizo sospechar a los arrendadores que utilizarían el inmueble para un fin muy distinto al pactado y del que acabarían enterándose tiempo después. «Estábano empregando de tapadilla para a prostitución» de chicas, explican.

Al denunciarlo, las autoridades les explicaron a los afectados que esta práctica empezaba a ser «común» y que ya se había tenido conocimiento de «varios» pisos en la localidad empleados con este fin. En el mes de enero, con cierres perimetrales y toque de queda aún en vigor, ya hubo quejas vecinales al respecto y en el instituto armado constaban al menos cuatro apartamentos en los que presuntamente se desarrollaba esta actividad, según explicó La Voz en su día.

El trasvase de la actividad de los clubes de alterne a los apartamentos viene dado, en la mayor parte de los casos, por las restricciones que ha traído consigo la pandemia y los horarios de cierre impuestos a los locales. Sin embargo, la Guardia Civil explicó en su día que su capacidad para actuar en estos casos es muy limitada.

Desde la inmobiliaria que relató los hechos a La Voz de Galicia reclaman que se tomen medidas, «porque nalgúns casos os propietarios non teñen nin idea do que pasa e poden meterse en problemas».