Todo Lar, treinta años equipando desde Carballo los hogares de la Costa da Morte

Marta López CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana Garcia

La cadena afronta su trigésimo aniversario con un nuevo reto, la sombra de los gigantes de la venta electrónica

05 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Ni la incursión de los bazares orientales, ni la explosión de la burbuja inmobiliaria ni el todopoderoso Amazon han podido todavía con Todo Lar, una cadena familiar especializada en productos del hogar que, comandada por el carballés José Manuel Naya, cumple 30 años en este 2021.

«E con enerxía para outros trinta, nin esta pandemia nos baixou a moral», dijo él mismo estos días en una conversación con Fran Rodríguez para Radio Voz Bergantiños.

Socio fundador, primero trabajó mano a mano con su cuñado, y ahora con los hijos de este. Hasta 1991 tenían salas de juegos, con futbolines y demás pasatiempos, pero a principios de década observaron cómo en Madrid empezaban a ganar popularidad los comercios del «todo a 100 pesetas», así que decidieron cambiar de negocio e importar la fórmula. Los comienzos, reconoce Naya, «foron difíciles», porque siendo el precio su principal baza, no era nada fácil encontrar mercancía que encajase con lo que buscaban. «Agora sucede todo o contrario», señala el responsable de la compañía entonces llamada Re100.

Se rebautizó como Todo Lar para tomar distancia de los tradicionales bazares, con la intención de ofrecer una imagen más cuidada y con personal especializado. «É a nosa maior sorte, os traballadores que temos», indica Naya Varela.

Entonces llegaron los años previos a la crisis del 2008. Años de prosperidad en los que se vendieron muchos pisos «e a xente precisaba útiles e cousas para os seus novos apartamentos». La carrerilla que cogió la cadena pronto se vio frustrada con el pinchazo de la burbuja inmobiliaria. Hubo que cerrar tiendas y recortar en personal, apretarse el cinturón por una recesión que duró mucho más de lo que preveían. «Despois de ver como sucedera en crises anteriores, como a dos noventa, eu agardaba que durase dous ou tres anos, pero nada máis lonxe da realidade», confesó Naya a este diario.

En la actualidad es el gigante Amazon el que les quita el sueño, como a cualquier pequeño comercio. Con enormes facilidades para la devolución de productos e ínfimos costes de envío, es prácticamente imposible hacerle frente. «Esta pandemia aínda lles axudou a vender máis, téñeno todo ao seu favor», lamenta el responsable.

Todo Lar también sintió el embiste de la crisis sanitaria, sobre todo en la campaña de pascua del año pasado. «Tivemos que tirar todo o chocolate, porque nos caducaba», explica Naya, «a do verán funcionou ben no referido ao xardín, pero non tanto os produtos de praia; e logo xa se recuperou bastante na volta ás clases e polos Reis Magos». Por esas campañas ha apostado siempre la firma, especializada también en juguetes.

En A Coruña, Arteixo, Carballo, Santa Comba, Ponteceso, Cee, Vimianzo y Bembibre tienen tiendas, aunque su almacén principal está en la capital de Bergantiños. Rondan la treintena de empleados y apuestan por el «trato cercano» para diferenciarse y para fijar clientela.

Para celebrar este 30º. aniversario han hecho un «esforzo extra» entregando «rascas» en cada compra para repartir entre los clientes vales de compra o diferentes premios consistentes en productos del hogar. También sortean cheques regalo de 30 euros a través de sus redes sociales y han rebajado algunos productos para la ocasión. Tampoco se olvidan de los más pequeños, a los que Naya agradece su «comportamento exemplar»: les regalan globos y chuches al entrar a los comercios.

«Despois destes trinta anos, estou moi agradecido coa xente que nos visita, cos nosos empregados e cos proveedores. Sen eles non fariamos nada», concluye José Manuel Naya.