El mes de enero arrancó en la Costa da Morte con un fuerte bajón en la venta de coches
CARBALLO
Las matriculaciones fueron solo 75, la mitad que los dos años anteriores
02 mar 2021 . Actualizado a las 09:23 h.En la jornada de ayer se publicaron los datos de las ventas de vehículos en febrero en España, pero solo los totales. Por municipios, los disponibles son los de enero. Y no son buenos: la caída ha sido del 50 %, nada menos, con respecto al mismo mes del año anterior: 75 turismos en este 2020 y 151 en enero del año pasado, sumando siempre los municipios de Bergantiños, Soneira y Fisterra, además de Cerceda. Casi lo mismo si se compara con el primer mes del año del 2019, cuando se vendieron 149, prácticamente la misma cifra. Febrero tampoco ha ido demasiado bien en general, pero marzo puede significar un cambio de tendencia, señala Marcos Díaz Molk, del Grupo Dimolk, con base en Carballo, ahora que parece que las cosas se normalizan poco a poco.
Enero fue malo en ventas en la zona, y en todas partes. En Galicia, por ejemplo, los 1.500 coches matriculados supusieron el peor dato desde 1989 en ese mes. ¿Cuál es la clave de tan drástica caída? No hay una, son varias. Extrínsecas e intrínsecas.
Las primeras son evidentes: la pandemia afecta a casi todos los sectores, y los vehículos no se libran. No solo por cuestiones económicas, que también, sino porque las restricciones a la movilidad impidieron acudir a los concesionarios (salvo a talleres), o si se podía, el miedo a los contagios (por desplazarse a cualquier lugar, no este en concreto) no fue el mejor aliado para salir a comprar. El mes de abril del año pasado fue terrible en ventas: solo cuatro unidades en la zona, el peor dato de la historia, muy lejos de cualquier otro. En marzo ya se había notado el descenso, con 59, y en mayo empezó a recuperar, con 65. En total, en la zona en el 2020 se matricularon 1.453 turismos, frente a los 1.862 del 2019.
Pero hay más factores, explica Marcos Díaz. La subida de impuestos de este ejercicio llevó a acelerar ventas al final del pasado. El último trimestre se movió por encima de 140 vendidos cada mes. No es mucho (hubo años en los que se superaban las 400 unidades algunos meses), pero suponía volver a la línea ascendente. Fue una manera de adelantar ventas por parte de muchos usuarios, de ahí que marzo puede suponer la vuelta a la normalidad. Pero también influye que haya potenciales clientes que aún no tienen del todo claro qué coche quieren: diésel, gasolina, híbrido, híbrido enchufable, eléctrico...
Las decisiones, antes, eran mucho más fáciles, y siempre ganaba el diésel, que aún se sigue imponiendo entre quienes hacen muchos kilómetros cada día. La electricidad, en todas sus vertientes, va a más, pero el camino es aún muy largo y hay que implantar nuevas infraestructuras que llegan muy lentas, Y donde las hay, apenas se usan, como ese cargador público en el Rego da Balsa de Carballo en el que es muy raro ver algún vehículo cargando.