El 2020 echó el cierre con el peor dato de mortalidad en las carreteras de la Costa da Morte desde el 2007

Antonio Longueira Vidal
T. Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana García

La denominada recta de A Tablilla, un tramo de dos kilómetros de longitud situado entre Cerceda y Tordoia, se volvió a convertir en uno de los puntos negros de referencia de toda la comarca

10 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El 2020 echó el cierre definitivo. Fue, sin duda, un año nefasto en muchos aspectos, también en lo que a víctimas se refiere en accidentes de tráfico. En los últimos doce meses perdieron la vida 14 personas, es decir, cuatro más que en el 2019.

Se trata de una estadística ciertamente relevante y, sobre todo, muy preocupante, teniendo en cuenta que en tres meses la población estuvo confinada en sus casas por el primer estado de alarma decretado por el Gobierno, que en la actualidad hay toque de queda y que llegó a haber hasta cinco cierres perimetrales, algunos de ellos conjuntos en la zona.

Estas 14 víctimas contabilizadas el pasado ejercicio representan el peor dato de los últimos trece años. Hay que remontarse al 2007 cuando se registraron los peores números (ver tabla anexa), con un trágico balance de 22 fallecidos. Si se toma como referencia precisamente el 2007, desde entonces las carreteras de la comarca segaron la vida de 146 personas.

La denominada recta de A Tablilla, un tramo de dos kilómetros de longitud situado entre Cerceda y Tordoia, se volvió a convertir en uno de los puntos negros de referencia de toda la comarca, al cobrarse la vida de tres personas en el último año: dos jóvenes de 21 y 26 años, vecinos de A Silva y Ordes, respectivamente, y un vecino de Tordoia de 61 años. Los tres fallecieron en el mismo punto kilométrico: en las inmediaciones de la gasolinera de A Tablilla.

En la recta de Rus, escenario de múltiples accidentes de tráfico en los últimos años, con siete víctimas contabilizadas desde el 2014, volvió a perder la vida un vecino de la zona: en este caso un joven de 21 años, cuyo vehículo se salió de la vía por el margen derecho e impactó brutalmente contra otro turismo que se encontraba aparcado. Pese a los esfuerzos de los sanitarios, estos solo pudieron certificar su muerte.

Cada año cambia el perfil de las personas que se dejan la vida en la carretera. El del 2020 fue el de un varón -13 de las 14 víctimas eran hombres- de 37 años y amante del mundo del motor. Tres motoristas perecieron, en A Laracha, Dumbría (un turista de Barcelona) y Muros (un joven de Cee) y otros dos fallecidos tenían 21 años. A diferencia de otros años, el 2020 no se caracterizó por las muertes por atropello: de los 14 fallecidos solo uno era transeúnte.