Tractores y máquinas salen a las carreteras a echar sal: adiós al caos de tráfico del jueves

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana Garcia

Las cifras de incidencias este viernes cayeron en picado con respecto a las contabilizadas este jueves, pese a que hace más frío

08 ene 2021 . Actualizado a las 20:31 h.

Jueves: 13.00 horas. En la Policía Local de Carballo se habían recibido 102 llamadas telefónicas solicitando ayuda por incidencias provocadas por las heladas. En Protección Civil superaban también el centenar de llamadas. Este viernes, apenas 6. La diferencia entre el caótico jueves, con más de cien accidentes de tráfico (la mayoría, salidas de vía) y más de 50 personas heridas y lesionadas, en la mayor parte de los casos por caídas en la calle, radicó básicamente en la presencia masiva de tractores en toda la comarca vertiendo sal. No solo en las carreteras principales, sino también en gran parte de la red secundaria.

En Coristanco, dos vehículos agrícolas, con abonadoras, estuvieron desde primera hora de la mañana vertiendo sal por todo el término municipal, de manera especial en aquellos puntos susceptibles de sufrir intensas heladas. En Carballo, al menos dos tractores se dedicaron a la realización de estas mismas tareas. En Cerceda, Protección Civil se afana en preparar las vías, sobre todo las de acceso al Monte Xalo y en las parroquias de Queixas, As Encrobas y Rodís, sin olvidar la capital municipal, con vistas al nuevo desplome de temperaturas previsto por MeteoGalicia para la jornada de mañana sábado, donde la cota de nieve en la costa se situará en torno a los 200-300 metros —A Silva se sitúa a 515 metros sobre el nivel del mar; y Cerceda, en torno a los 500—. En A Laracha, los equipos de emergencias trabajan a destajo para mantener la amplia red viaria limpia (unos 600 kilómetros de carreteras), sobre todo en las parroquias de Montemaior y Soandres, que son las que precisamente se sitúan en zonas susceptibles de sufrir nevadas mañana. En Carballo, la sal es visible en la mayor parte del casco urbano, algo que este jueves se echó en falta y que derivó en múltiples caídas de peatones en la calle.

Ana García

Los accesos a Carballo no sufrieron las retenciones de este jueves, cuando 200 vehículos quedaron atrapados en el hielo entre O Campo da Feira de Berdillo y As Labradas. O en la AC-552, donde la sal era visible desde el acceso de la planta de Alcoa. O la autovía de la Costa da Morte, que este jueves se convirtió en una peligrosa pista de patinaje, con varios accidentes de tráfico, salidas de vía de camiones y retenciones, sobre todo entre los puntos kilométricos 39 y 42, en A Agualada..... Este viernes había sal en todo el trazado lo que evitó los desastres de ayer.

Ana Garcia

Entonces: ¿por qué ayer jueves hubo semejante tasa de incidencia en la Costa da Morte y hoy, viernes, por suerte, apenas se produjeron hechos de relevancia? Simplemente, por la presencia masiva de tractores en la Costa da Morte echando sal. La lluvia registrada a primera hora de la mañana de ayer sí pudo influir en la elevada siniestralidad, pero al final si los equipos de emergencia actuaran con celeridad «nada de esto hubiera ocurrido», apuntaron varias personas vinculadas a los servicios de emergencias de la comarca. «No fuimos capaces de dar una respuesta rápida y eficaz a las heladas que se estaban produciendo», reconocieron con la boca pequeña. Admiten que pese al aviso de MeteoGalicia de que este jueves se iba a producir un desplome de las temperaturas, con el consiguiente riesgo de heladas y hielo en las carreteras, los equipos de emergencias solo actuaron en aquellos puntos en los que son habituales las placas de hielo. «Nadie se esperaba lo que pasó finalmente, pero tampoco se actuó conforme a las previsiones climatológicas». Alguno, incluso, admitió que viendo lo que se avecinaba llamó el miércoles al 112 para alertar de la posible presencia de hielo en las carreteras: «Pero non fixeron nada, só actuaron cando xa non había nada que facer».

Eso no sucedió hoy viernes. Las máquinas y los tractores trabajaron a destajo desde la misma tarde de este jueves en la autovía de la Costa da Morte, en Cee, Dumbría, Camariñas, Vimianzo, Carballo, A Laracha... En la capital de Bergantiños se intensificaron las tareas de verter sal en el casco urbano. Ahí radica básicamente la diferencia entre la caótica jornada de este jueves y la tranquila (toquemos madera) jornada de hoy viernes.