No hace falta salir de la Costa da Morte para hacerse con los mejores regalos

Marta López CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Diego Alonso

Artesanía, alimentación, literatura, arte... Hay mucha inspiración en esta tierra

03 ene 2021 . Actualizado a las 23:25 h.

A estas alturas los Reyes Magos seguramente habrán hecho ya acopio de los regalos que repartirán en la madrugada del miércoles pero, en caso de que les quedase todavía algún fleco suelto, la Costa da Morte es el almacén perfecto para surtirse de detalles autóctonos, originales y hechos a mano. Así, Sus Majestades de Oriente también echarán un cable a los emprendedores de la zona comprando sus productos. Un «win-win», se diría en la jerga guiri.

Lo cierto es que el confinamiento perimetral de algunos concellos, y de las principales capitales de las compras, supondrá que muchos se lancen a la sana práctica de consumir en el comercio local. Si ese es su caso, podrá encontrar cosas como estas:

Alimentación. Del mar, como las conservas Ar de Arte, los deliciosos percebes de Corme, los cotizados longueiróns de Fisterra o la repostería marina de Silvina Muñoz; y también de la tierra, como los productos hortícolas de Bergantiños, los preparados cárnicos de Domínguez o el porco celta de Corcubión. Sin olvidarse de los licores artesanos, la cerveza con agua de mar extraída de Vimianzo o los exquisitos turrones y recetas artesanas que ofrecen desde Pan Ignacio. Hay variedad, pero eso sí, desháganse primero de la báscula, porque una vez empiecen a degustar la gastronomía de la Costa da Morte, ¡no podrán parar!

ANA GARCIA

Artesanía. Hablar de esta comarca es hablar de las curtidas manos de cientos de artesanos que luchan por no ser comidos por los gigantes del comercio. Localidades como Camariñas o Buño atestiguan el peso de actividades milenarias como el encaje de bolillos o la olería, mientras que en Baio se pueden conseguir aún piezas de lino. Marroquinería, madera o incluso redes de pesca son otros de los materiales amaestrados por nuestros artesanos y reconvertidos en auténticas obras de arte. El genuino Pepe de Olegario, asimismo, tiene decenas de cartas de navegación que dan cuenta de la riqueza subacuática de una comarca sembrada de barcos hundidos.

BASILIO BELLO

Arte. La Costa da Morte es inspiración para personalidades como el polifacético Mon Lendoiro, el marinero Xosé Iglesias o el consagrado grabador carballés Manuel Facal. Quien busque hacer un regalo original, y personalizado, bien puede optar por los retratos de la corcubionesa Marinna Mouzo o por el amplísimo catálogo del establecimiento ceense Stoupa. Esculturas con materiales quirúrgicos es lo que ofrece Alberto Costa, y de marcado carácter feminista son las creaciones de Viki Rivadulla. Susana Llorente, Yano Yoro, les transportará a la cultura japonesa con la técnica del sumi-e, que aplica a productos de cerámica como cuencos o colgantes. Ilustradores, amantes de la papiroflexia y múltiples fotógrafos completan el catálogo de creativos que han fijado su base en la Costa da Morte.

Literatura. La larguísima lista de obras sobre la zona o de autores de la zona se ha completado en este atípico 2020 con casi medio centenar de incorporación: ya sea de divulgación, para conocer más sobre patrimonio y personalidades locales; o de ficción. El último lanzamiento lo firma el fisterrán Roberto Traba con Ola miña bonita, un romance iniciado en los convulsos años de la ocupación francesa. Personajes reales y mucha «fisterranía», promete Traba.

Ana Garcia

Música. La Costa da Morte es tradición y eso se refleja en las investigaciones de músicos como Xabier Díaz, que se inspiró en Berdillo para avanzar su nuevo álbum; y de bandas decanas como Luar na Lubre. Pero también es otros géneros como el pop de la ceense Rocío Caamaño, el pop-rock de los carballeses Apart o el rock de Zënzar. Variedad de ritmos, disponibles tanto en formato físico como en digital, para regalar música tras un 2020 que perdió toda su sonoridad.

Experiencias. Para los fans de los obsequios intangibles: deporte, experiencias gastronómicas, el placer de las aguas termales o estancias en hoteles de ensueño.