Los equipos apelan al diálogo para una respuesta conjunta a la Federación Galega
17 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.«Una locura». Está es la frase más repetida entre los equipos de primera, segunda autonómica y categorías inferiores ante la vuelta a la competición.
«Nós somos contrarios a volver. Está claro que hai rapaces que pagan a cota e queren volver xogar, e ademais os equipos precisan facturar coas entradas do público, pero no noso caso parécenos un despropósito debido á situación sanitaria», apunta Manuel Muíño, vocal del Club do Mar de Caión, que tiene claro que cada club tiene una posición diferente, por lo que se muestra dispuesto al dialogo para lograr una respuesta conjunta a la Federación Galega. Un punto en el que coincide el presidente del Ponteceso, Álvaro Domínguez, que recalca que en los próximos días se reunirá todo el equipo para tomar una decisión. «Nos juntaremos todos, no solo la directiva, para hablar y analizar si es viable competir o no. Igualmente, estamos dispuestos a hablar con otros equipos. La unión hace la fuerza y entre todos podemos valorar los protocolos, ver si son viables, y si no, trabajar en otras opciones».
En el caso del Corme, el director deportivo, Suso Da Torriña, considera un despropósito volver a los campos. «A Federación apela á seguridade nos campos, pero estamos nunha pandemia. Todos temos familia e moitos membros do club son maiores. Ademais, algúns xogadores non están dispostos a volver porque lles preocupa polo traballo».
Más optimistas son en el Camariñas, de segunda autonómica. «Estamos listos para comezar. O equipo está adestrando xa unha vez a semana e dende o día 8 de xaneiro retomaranse os tres adestramentos semanais», indica el presidente de la entidad, Vicente Carril. En el caso del Malpica, se muestran positivos. «Desta vez vexo máis factible comezar, pero aínda non estamos adestrando», aclara el entrenador, Adrián, Gurita.
La forma física de los jugadores preocupa a los técnicos
Uno de los factores que más preocupa a los clubes es el estado físico de los jugadores, que llevan nueve meses sin competir y muchos de ellos también sin entrenar. El presidente del Ponteceso, Álvaro Domínguez, admite que las condiciones físicas no son las que deberían darse antes de empezar una liga. Un punto que tratará en la reunión que mantendrá con todo el equipo. Igualmente, el director deportivo del Corme apunta que la vuelta se traduciría en más lesiones y en una desigualdad entre los participantes. «Sería unha liga adulterada porque non todos chegan nas mesmas condicións», indica.
Asimismo, todavía no está claro que todos los jugadores estén dispuestos a volver al campo. «No noso caso, se comezamos asumiremos as consecuencias, pero é posible que algúns rapaces non veñan xogar porque non lles vale a pena. Pode ter consecuencias no traballo, xa que no caso dun positivo deberán facer corentena e a situación é complicada. De 16, igual tres ou cinco non virían», indica el entrenador del Malpica, Adrián, Gurita.
Para Suso da Torriña, del Corme, lograr conformar un equipo no será tarea fácil. «Cando saibamos todo seguro poderemos valorar, pero eu convivo con eles e sei que lograr xuntar xente suficiente custaríanos», indica el director deportivo, que apela que desde la Federación tampoco han aclarado las posibles consecuencias en el caso de no inscribirse, ya que la FGF exigirá confirmar la inscripción de equipos dispuestos a competir para evitar abandonos en medio de la liga.
Pruebas PCR
Otro de los aspectos que más preocupa es la obligatoriedad de que los jugadores se sometan a test cada catorce días, ya que aunque las pruebas se subvencionarán, aún se desconoce cuánto deberá aportar cada club.
