«No se puede meter en el mismo saco a todos los pescadores recreativos»

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Jose Manuel Casal

Los aficionados a la pesca deportiva responden: «Somos una actividad que genera mucha economía a su alrededor»

27 nov 2020 . Actualizado a las 10:39 h.

Después de que axentes del Servizo de Gardacostas expulsaran este martes por la tarde a numerosos pescadores recreativos de los muelles de Laxe, Malpica, Barizo y Corme para dar cumplimiento a la prohibición fijada por Portos de Galicia de pasear, zambullirse, nadar, hacer deporte o pescar en los muelles, los representantes de diversos colectivos han querido defenderse de lo que consideran «un ataque hacia una actividad que genera mucha economía a su alrededor», tal y como apuntó Fernando Piñeiro Oubiña, cambadés de 60 años y secretario de la Asociación Galega de Pesca Deportiva.

Según él, «si se habla de furtivos, no se puede hablar de pescadores recreativos, no se nos puede meter a todos en el mismo saco». Y argumentó: «Si hablamos de furtivos lo hacemos de todos los ámbitos: de la pesca recreativa y también de la profesional, que también los hay, lo que sucede es que a muchos no les interesa hablar del tema». Y añadió: «Un furtivo es una persona que actúa fuera de la ley, un furtivo no es un pescador recreativo, sino que utiliza el paraguas de la pesca recreativa para lucrarse, no para divertirse», sentenció. Fernando Piñeiro dijo que esta actividad lúdica ofrece «un buen trato y respeto al medio ambiente».

Uno de los caballos de batalla es la prohibición de acceso a los puertos para poder disfrutar de la caña: «Creo que hay que ser un poco flexibles y comprensibles, sobre todo ahora con las restricciones, pero si hay actividades fuera de la normativa, lo que se debe hacer es llamar a la Guardia Civil para que actúe en consecuencia y sancione».

Mesa por el furtivismo

De la misma opinión es José Antonio Beiro Diz, de Vigo, y presidente de la Federación Galega de Pesca Recreativa Responsable: «No podemos sacrificar a más de 80.000 aficionados por 100 o 200. Esos 100 o 200 se meten dentro de un paraguas que no les corresponde». La entidad que preside José Antonio Beiro aglutina a 33 asociaciones y clubes náuticos desde Ribadeo hasta A Garda y unos 15.000 aficionados: «Yo no estoy de acuerdo con que un jubilado que cobra 600 euros o un desempleado que percibe un subsidio de 420 vayan y vendan ilegalmente. Eso es un fraude y nosotros lo condenamos. Eso no nos vale. Habrá que debatir el problema de los subsidios y el desempleo en otros foros, pero no vale proteger estas prácticas porque el covid-19 nos afecta a todos de alguna manera». José Antonio Beiro propone, por ejemplo, que estas personas con recursos muy por debajo del salario mínimo interprofesional puedan legalizar las capturas con un permiso legal especial para poder vender en las lonjas. Y considera que es necesario crear la Mesa del Furtivismo de Galicia: «Sería una buena plataforma para debatir todo esto, pero deberían estar presentes representantes de la Administración, de la pesca profesional, de la pesca recreativa, de las fuerzas de seguridad y de Hacienda».

También quiso dar su opinión sobre la polémica Xan Carlos Sar, teniente de alcalde del Concello de Fisterra: «Falamos de furtivos na pesca deportiva, pero non o facemos dos barcos que pescan en zonas ilegais». Y recordó que cinco cerqueros estaban sobre las diez de la noche de este miércoles faenando justo enfrente de la playa de Langosteira «e ninguén da Xunta foi xunto eles para sancionalos».

Comprensión

El portavoz del BNG fisterrán se mostró comprensible con algunos de los que venden sus capturas fuera de los canales habituales: «Moitos son xubilados ou persoas no paro que non teñen como manter ás súas familias e non os podemos crucificar por iso. Mercado negro haino, na pesca profesional ou na construción e ninguén di nin denuncia nada». Xan Carlos Sar también reclamó respeto para una actividad, la pesca recreativa, tan arraigada en la Costa da Morte y en el conjunto de Galicia, sobre todo en estos tiempos de toque de queda, restricciones y cierres perimetrales.