José Muíño apuesta por una desescalada diferenciada en el rural y las ciudades

F. Rodríguez / T. Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana Garcia

Cita co Concello | Cabana | El regidor participó en el espacio semanal de Radio Voz Bergantiños

29 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Este lunes varios expertos en materia sanitaria abogaban, y así lo explicaban en La Voz de Galicia en Carballo, por una desescalada diferenciada entre el rural y las grandes ciudades. Argumentaban que la incidencia del covid-19 era menor, por ejemplo, en la Costa da Morte que en otras comarcas con similares censos de habitantes, debido, en gran medida, a la elevada dispersión poblacional. El alcalde de Cabana, José Muíño, se sumó a este discurso y considera que la desescalada por fases no debería ser simétrica, sino teniendo en cuenta las características de cada zona. Así lo apuntó ayer durante su intervención en el Cita do Concello de Radio Voz Bergantiños, en el que el coronavirus acaparó la práctica totalidad del debate.

José Muíño explicó que en Cabana, como en cualquier concello del rural, «percíbese unha especie de calma tensa» y aunque en todo momento habló de «extremar as precaucións» para evitar posibles contagios, entiende que el proceso de normalización de la vida social, sanitaria, educativa y económica debería ser diferencia entre el rural y una gran urbe: «Aquí podes pasearte toda a mañá e non atoparte con ninguén. Iso non é factible nunha cidade, onde a xente vive en pisos e ten un contacto permanente cos veciños». En todo caso recalcó que tendrá que ser el Gobierno el que determine cómo se debe llevar a cabo todo este proceso.

El regidor también habló del papel de los concellos a la hora de facilitar material a los vecinos, autónomos y empresarios: «No noso caso repartimos máscaras da cara das denominadas FFP2 nun momento no que escaseaban nas farmacias. Repartimos tamén mil pantallas protectoras, levamos alimentos e medicamentos ás persoas maiores que viven soas e axudamos a aquelas familias que así o precisan. Agora mesmo case toda a actividade municipal está relacionada con servizos sociais, como o de axuda no fogar».

El resto de la actividad está bajo mínimos, pero aun así indicó que el personal municipal y el equipo de gobierno tratan de hacer lo posible para que la normalidad impere en este escenario de crisis sanitaria. Apuntó que hay un número de teléfono a disposición de los vecinos (609 213 480) y que aquellas citas urgentes son tramitadas a través de una centralita y atendidas a la mayor brevedad posible. Hasta la agrupación de voluntarios de Protección Civil y los agentes de la Policía Local realizan labores de apoyo para que los vecinos, sobre todo los más mayores y los dependientes, puedan tener garantizado su bienestar.

Y en clave más general, Muíño tiene claro que habrá un antes y un después de la pandemia: «A esta crise sanitaria viralle outra económica e eu diría, incluso, que outra social. Creo que a forma de relacionarnos cos demais será moi diferente», vaticinó.