El carballés Leo sigue los pasos de su hermano en motocrós

m. r. CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Basilio Bello.

«Marc Márquez no corre en motocrós. Yo le gano», dice a sus cinco años

13 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

 Carballo fue en las últimas décadas del siglo veinte referente en motocrós. Años después, prevalece el autocrós. Son muy pocos los jóvenes que se animan a subirse a las dos ruedas. Por este motivo los que lo hacen, se convierten en grandes promesas para recuperar este deporte. Primero fueron los hermanos Adrián y Joaquín Castro Barrigón los que se iniciaron en el motocrós de forma muy temprana, con cinco y cuatro años, respectivamente. Ahora, Daniel y Leo Díaz Rama los imitan, con la diferencia de que su incursión fue todavía más precoz, con tres y un año y diez meses. La historia del hermano mayor (el primero), que tiene ahora siete años (pronto serán 8), la publicó La Voz este lunes. Dará este año un salto en su carrera deportiva gracias al apoyo del Concello. La del pequeño Leo, es bien peculiar.

Cumplirá los seis años en mayo. Pero lo cierto es que ya tiene más experiencia andando en moto, que yendo al cole, pues al poco de saber caminar, ya logró subirse a las dos ruedas, sin ruedines.

Para poder competir, es necesario tener seis años. No obstante, en distintos circuitos, permiten correr con anterioridad, aunque de forma lúdica. En ese sentido, el joven Leo, a diferencia de su hermano, ya tuvo un contratiempo. Cuando tenía cuatro años, rompió el fémur a raíz de que un compañero que era mayor le adelantó de forma inapropiada, tirándolo de su moto. No obstante, aun así, resulta sorprendente que el pequeño no le cogió miedo a este deporte, aseguran sus padres, Alberto Díaz y Susana, que, por el contrario, desde ese momento, comentan que comenzaron a fijarse más en la edad de los pilotos que corrían con su hijo pequeño.

Estos dos hermanos tienen, además de mucha soltura en la moto, un tremendo desparpajo. Ambos admiran a Marc Márquez, entre otros pilotos destacados. Lo cierto es que Leo se considera mejor que este. Él explica los motivos: «Marc Márquez no corre en motocrós. Yo le gano».

El joven de cinco años evolucionó más despacio que su hermano, al que envidia al ver que este puede competir mientras que él no. No obstante, el motocrós los une todavía más. Ambos entrenan todas las semanas juntos, bajo las directrices de su progenitor, un aficionado del deporte desde pequeño. Corre con el dorsal número 14, en referencia al 2014, año en el que nació, en una Yamaha PW50 que fue la primera motocicleta que tuvo Daniel. Como todo hermano pequeño, le toca ir tomando las posesiones de su hermano. El próximo año dará el salto a la competición.