Las trampas en Bergantiños se instalaron hace año y medio

La Voz

CARBALLO

04 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El plan de acción para la contención de la polilla guatemalteca ha ido cambiando a medida que se han añadido territorios. Los últimos son las parroquias de Noicela, en Carballo, y Lendo y Caión, en A Laracha, aunque todavía no es oficial hasta la publicación de la resolución en el Diario Oficial de Galicia. La zona tapón son las parroquias que lindan con las afectadas.

Trampeo. Desde un año y medio la Xunta ha establecido una red de trampeo en la comarca de Bergantiños. Fue a raíz de la aparición de la polilla en Muxía cuando se decidió intensificar el control en el área, una de las más delicadas por su gran producción. Las trampas se encuentra a una distancia de cinco kilómetros unas de otras.

También tiene trampas Cerceda, sobre todo en el entorno de Sogama, que es adonde se llevan a destruir las patatas infectadas.

Revisiones. En la comarca de Bergantiños se han realizado revisiones de las trampas cada mes y medio, lo mismo que en la zona demarcada (Muxía y las parroquias de Carballo y A Laracha), aunque en este caso se tratará de verificar si sigue la plaga y contar las capturas en el campo para determinar la incidencia. En la zona tampón, que son las parroquias que lindan con las afectadas, el control será cada dos semanas y también habrá controles visuales durante la cosecha, con el fin de verificar daños que puedan asociarse a la plaga, aunque esto no podrá realizarse hasta marzo, que es cuando se comienza a plantar.

Medidas área afectada. Además de la prohibición de plantar en las zonas infestadas en un plazo de al menos dos años, la Xunta asegura en su plan que retirará de los campos los rebrotes de años anteriores y que los agricultores tendrán que realizar tratamientos fitosanitarios en sus campos.

Medidas zona tampón. La última está formada por ocho parroquias. De Carballo son las de Lema, Vilela y Rebordelos y de A Laracha están las de Lemaio, Cabovilaño y Torás. Monteagudo y Sorrizo corresponden a Arteixo. Todos los campos de patatas tendrán que ser tratados antes de la cosecha y durante la fase de formación del tubérculo. Las patatas no podrán destinarse a siembre y las de consumo solo se podrán vender fuera de la zona demarcada previo control oficial.

Información y formación. Las principales tienen que ver con el movimiento de la patata y para ello es fundamental la colaboración de los productores por lo que tanto la Xunta como os concellos colaborarán para la realización de una campaña de divulgación, pero también habrá formación para que los agricultores aprendan a detectar la plaga. Las charlas ya se realizaron en Muxía, uno de los concellos afectados por la polilla guatemalteca.