El lujoso buque del príncipe saudí Mohammed bin Salman está refugiado del temporal, presumiblemente con el cuadro más caro del mundo a bordo
05 nov 2019 . Actualizado a las 19:52 h.El yate Serene, propiedad del polémico príncipe saudí Mohammed bin Salman (MBS), se encuentra fondeado al abrigo del cabo Fisterra para protegerse del temporal. No es el único. Están también los mercantes Widor (Chipre) y Atlantic Down (Holanda), pero todas las miradas las atrae la embarcación de superlujo del ministro de Defensa y gobernante de hecho de la teocracia saudí. Sus 134 metros de eslora por 18 de manga le convierten, por tamaño, en el buque de recreo número 15 del mundo. Fue fletado por primera vez en el año 2011 para el empresario ruso del vodka Yuri Scheffler, que, según la prensa especializada pagó por él unos 280 millones de euros.
Sin embargo, en el 2014 y durante unas vacaciones en la costa francesa, el sanguinario príncipe, repudiado internacionalmente por el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, se encaprichó de él. Mandó a un emisario y, según The New York Times, lo compró por 500 millones de euros.
La lista de lujos del Serene es prácticamente interminable. Sus siete cubiertas suman una superficie útil de 12.694 metros cuadrados, en los que su ubica un hangar, una plataforma para el aterrizaje de helicópteros, una enorme piscina de agua salada y otra de agua dulce, cine, teatro, sala de visión subacuática y se dice que hasta un submarino. Al menos el espacio para albergarlo lo tiene.
Sin embargo, también según The New York Times, que cita al comisario y marchante de arte Kenny Schachter contiene una posesión mucho más valiosa, el Salvador Mundi de Leonardo Da Vinci. El cuadro porque el que hace unos dos años se pagó en una subasta en Christie’s de Nueva York la mareante cifra de 400 millones de dólares y que, según Schachter cuelga en uno de los salones del yate.
Lamentablemente ni su presencia ni la del propio príncipe a bordo en Fisterra pudieron ser contrastadas esta tarde.