Fue un duelo emocionante que finalmente se decantó por el lado canario
20 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El Calvo Xiria y el Lanzarote ofrecieron ayer, en un abarrotado pabellón Vila de Noia, un balonmano de muchos quilates. De dos equipos que aspiran a todo en la Primera Estatal. Fue un duelo emocionante, intenso y polémico, que finalmente se decantó del lado canario, que basó su triunfo (21-24) en una férrea defensa, que se le atragantó al elenco local, sobre todo durante la segunda parte. Como todo gran partido que se precie, la labor de los colegiados, Pablo García e Ignacio Rubio, fue muy protestada por los aficionados locales.
El choque comenzó muy igualado, con mínimas diferencias en el marcador. Sin embargo, en el minuto quince, los visitantes abrieron una pequeña brecha (7-9), contrarrestada por los carballeses en un gran arreón final (13-13, al descanso).
La segunda parte comenzó como había finalizado la primera. Con máxima igualdad. Pero el partido se rompió en el minuto 45, cuando los canarios se pusieron nuevamente dos por encima (15-17). Dos pérdidas en ataque, la mayor presión de la defensa y dos grandes paradas de Salazar, portero del Lanzarote, permitieron a los isleños llevarse los dos puntos en litigio (21-24).