En Fisterra, la coalición del PSOE y el BNG costó más de lo esperado. En Corcubión, el apoyo del independiente a los socialistas desbarató una mayoría alternativa
16 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Hay concellos en los que la sesión de investidura es casi un trámite. Los de las mayorías absolutas, por motivos evidentes, pero incluso en las simples no hubo sorpresas, pese a todo lo que se especuló y habló en las última semanas. Fisterra es un caso claro: la negociación entre PSOE y BNG fue muy dura, hasta ayer casi a las 11.00, pero todo quedó como estaba, o casi: obras y servicios pasa a los nacionalistas, y seguridad se queda en el PSOE. Un pequeño cambio que no refleja la intensidad del debate interno.
El alcalde, José Marcote, indicó que unos y otros crecieron en la misma proporción, y que además los escaños se mantienen, por lo que lo lógico es que siga todo igual. En su discurso, el alcalde felicitó a los vecinos «pola súa madurez política», y abogó por, en estos próximos cuatro años, continuar algunos de los proyectos que ya han comenzado o están previstos entre ambos socios.
En Corcubión, los números daban para varias mayorías, pero desde que se supo que José Ramón Rojo, del Partido Autónomo de Corcubión (Pacor) le dio su apoyo a los socialistas a cambio de las competencias en obras, desbaratando así una mayoría alternativa, poco margen de sorpresa quedaba. Acaso ver si eso se mantenía o no, y se mantuvo. Lalo Insua seguirá de alcalde, con esos cuatro votos, por la lista más votada; los dos de Sempre Corcubión apoyaron a los dos del BNG (candidato Xosé Ansede), y la popular Gema Freire se votó a sí misma. Insua aboga por «unir forzas para conseguir cousas importantes», a pesar de los limitados recursos.
En Ponteceso, el socialista Lois García Carballido repetirá como regidor cuatro años más, aunque con una clara mayoría absoluta en esta ocasión. Lamentó Carballido, sin embargo, que el resto de grupos no quisieran hacerse una foto de grupo conjunta, algo que, para él, es indicativo de un inicio «tormentoso» de mandato. En la votación, que fue secreta, hubo dos votos en contra y tres abstenciones, que se deduce que son de un Partido Popular totalmente renovado tras la renuncia de cinco integrantes.
En Dumbría, en un clima de plena cordialidad entre los 9 ediles del PSOE y los dos del PP, José Manuel Pequeño pidió que haya suerte y acierto en el mandato «para beneficiar aos veciños, e darlles o mellor posible».
En Zas, Manuel Muíño señaló que, pese a la experiencia, los nervios nunca se van en un día «tan importante», y expresó los buenos deseos de cara al mandato.