La base de la Costa da Morte lleva en estado de abandono desde principios del 2014
07 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Gente cerca para que les auxiliasen en un primer momento y un rescate con helicópteros de los servicios públicos de emergencias tienen la clave para que Tino Muíño Vilela, de 40 años, Manuel Vidal Santos (57) y María Gladys Alzate Hoyos (47) pudiesen salvar la vida, después de sufrir respectivos accidentes graves en el litoral de la Costa da Morte.
Al pescador vimiancés Manuel Vidal lo sacó su compañero Miguel Allones Bermúdez del mar en Cabanas (Fisterra), bajo el cementerio de Portela el pasado domingo 28 y lo rescató el Pesca 1. Está ingresado en el Virxe da Xunqueira a la espera de que hoy lo operen de un tobillo. En el mismo centro compartió habitación con el percebeiro muxián Tino Muíño, que sufrió idéntica lesión en Punta da Buitra el jueves día 2. Lo asistieron sus compañeros y lo sacó de la zona la tripulación del Helimer 401 con un espectacular rescate desde gran altura y ya se recupera en su casa de A Coruña. Mientras que la vecina de Culleredo, natural de Colombia, María Gladys Alzate, fue localizada flotando en el agua en el litoral carballés, entre Pedra do Sal y As Saíñas, otros bañistas le practicaron los primeros auxilios y la evacuó al Chuac de A Coruña un helicóptero medicalizado del 061. Según las últimas informaciones sanitarias aún se encuentra ingresada en la unidad de cuidados intensivos en estado grave.
Al margen de que en los tres casos resultó vital la pericia e incluso el arrojo de las personas que los socorrieron, existen unas posibilidades bastante altas de que no estuviesen aquí para contarlo de no ser gracias al recurso de las aeronaves. La bañista colombiana necesitaba atención hospitalaria urgente, el pescador de Pasarela iba a ser muy difícil subirlo por la zona rocosa con medios manuales y al percebeiro de Muxía muy probablemente acabase llevándolo la marea ante la impotencia de sus compañeros a la hora de ascender por una pared de piedra casi vertical. De ahí que cobre más vigencia que nunca el debate sobre la base de Salvamento Marítimo de Lires, desierta desde el 2014.