La Costa da Morte es la zona que más rápido reacciona a cambios sociales

R. Romar / M. L. CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

USC

Un estudio de la USC revela que los cambios sociales se dan más rápido en el rural que en los entornos urbanos de Galicia

25 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Las comarcas de Fisterra, Soneira, Bergantiños, Xallas y Muros son las que más rápido reaccionan de toda Galicia ante cambios sociales. Es una de las conclusiones que un grupo de investigación de la Universidade de Santiago ha extraído de un estudio sociológico que acaba de ser publicado en la prestigiosa revista científica Nature Communications.

Cuatro físicos -Jorge Mira, Mariamo Mussa, Alberto Pérez Muñuzuri y Luís F. Seoane- han aplicado un modelo matemático, desarrollado inicialmente por el baiés, para analizar la velocidad con la que ha variado el número de hablantes de gallego y castellano en Galicia desde hace casi un siglo. Estudiaron, según Mira, el comportamiento social en grupos humanos a través de las lenguas: «A variabilidade no uso da lingua é máis ou menos paralela á capacidade de cambio social dese colectivo. Un símil: vendo o fume (a lingua) intentamos comprender de que maneira se comporta o lume (a sociedade que emprega ese idioma)», dice el físico baiés.

Así, dividieron Galicia en veinte zonas supracomarcales y estudiaron diferentes variables, como la velocidad del cambio lingüístico o la capacidad de reacción ante un cambio social. En el primer caso, la Costa da Morte (junto con Xallas y Muros) obtiene uno de los valores más altos, solo por detrás de Deza-Tabeirós, Terra de Montes y Arzúa, Ordes y Terra de Melide. Pero es en la otra variable donde la comarca ocupa el primer lugar.

Una vez contrastados los datos, los cuatro físicos llegaron a la conclusión de que los cambios sociales pueden ser, paradójicamente, más lentos en los entornos urbanos que en el rural. En las ciudades, al evolucionar de forma más lenta, hay un mayor margen de maniobra para reaccionar ante determinados procesos y, por ejemplo, evitar la pérdida del gallego y frenar un avance globalizador que terminaría por extinguir muchas lenguas al preferir un único idioma para comunicarse. Advierten, sin embargo, de que este factor «non implica necesariamente unha perda de falantes de galego».

Partiendo de la base de que nuestra comunidad autónoma es el «laboratorio perfecto» para analizar este tipo de cuestiones sociales, al albergar la mitad de núcleos de población de toda España, el grupo de investigación constató que existe una profunda desconexión entre diferentes áreas de población: por ejemplo, entre la Costa da Morte y Ordes. «Vimos que non hai moita fluidez entre as diferentes zonas do territorio», señala Mira.