«Somos unha excelente opción para un turismo de dous, tres ou catro días, un turismo de proximidade, como tamén nós vemos en Portugal sempre esa opción segura e que nunca defrauda». Son las palabras del diputado provincial de Turismo, Xosé Regueira, en la presentación de la sexta edición de la Feira Ibérica de Turismo (FIT), que se celebrará del 2 al 5 de mayo en el municipio de Guarda. La Diputación es el destino invitado y a su amparo viajarán hasta tierras lusas los seis geodestinos en los que está estructurada la provincia, con especial hincapié en el turismo gastronómico y su potencial. Después de la de Lisboa, esta cita está considerada la segunda mayor feria del sector en Portugal, y la primera en cuanto a turismo asociado al territorio: «É o ADN e o valor de marca desta feira», destacó Pedro Machado, presidente de Turismo Centro de Portugal.
No cabe duda de que, en lo que a la Costa da Morte respecta, tiene esta muy diversos atractivos que año tras año, y aunque las cifras varían, atraen a gran cantidad de visitantes. No obstante, al territorio base ha de ir siempre unida una buena gestión, y más con la Semana Santa a la vuelta de la esquina. Para esas fechas siempre se dejan caer por estos lares muchos visitantes y, para ellos, comienza el goteo de propuestas desde cada municipio: no deberán perderse, por ejemplo, la Mostra do Encaixe de Camariñas, o la Festa do Congro de Muxía. Tampoco el castillo de Vimianzo, las Torres do Allo o el Ecomuseo Forno do Forte de Buño. Mucho menos el dolmen de Dombate, en Cabana. Cada uno de estos lugares guarda esencia de sobra para merecer una visita, pero como cada año volverán las voces críticas que, más allá de un planteamiento a nivel individual, o municipal, reclaman un paquete comarcal que permita a los turistas visitar todos estos lugares sin estar dependiendo de la buena guía de una casa rural, de lo acertado de las señales o de las recomendaciones del boca a boca.
El turismo para la Costa da Morte -y ahora se aspira a una reserva mundial de surf- ha demostrado ser de sobra importante, de ahí que se requiera una planificación y una aplicación práctica y real de esta unidad de geodestino que la Diputación llevará ahora a un encuentro en Portugal que en su pasada edición. Que nadie llegue aquí y se sienta perdido. No sería de agrado para ninguno de las aproximadamente 35.000 personas que se aguardan en la FIT 2019, muchas más de las 20.000 de la primera edición. Habrá en Guarda 150 expositores y medio millar de empresas e instituciones de relevancia, 11.000 metros cuadrados en los que departir sobre lo mucho que tiene para ofrecer esta provincia. Nadie debe ponerlo en duda, pero tampoco relajarse y bajar la atención.