Un poco de retranca, por favor

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CRÓNICA

CARBALLO

21 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Si alguna de las cualidades que se atribuyen a los gallegos demuestra su inteligencia es, precisamente, la retranca. Junto con la morriña probablemente sean las dos principales características de este noroeste peninsular, aunque, como todo, la intensidad va por parroquias. Si existiera un retrancómetro, la Costa da Morte ocuparía los primeros lugares.

Si uno se fija un poco se dará cuenta de que hay retranca de interior y de ribera. La primera es más modesta y la segunda, más brava. En todos los casos, se trata de un modo de afrontar la existencia con un inteligente sentido del humor, algo que las redes sociales parecen estar a punto de aniquilar. Probablemente no seamos más tontos que antes de que naciera Facebook o Twitter, pero ahora quedamos a la vista de todo el mundo y las chorradas que antes decíamos en casa o en el bar ahora las proclamamos ante el mundo entero.

Todo esto viene a cuento de la frase que pronunció una vecina de Arou que se había agenciado 40 botellas de aceite de girasol que el mar había llevado hasta la playa. Preguntada por si se atrevería a consumir el líquido contestó como es tan normal en esa zona. Con mucha retranca. Dijo que antes les freiría unos bistés a sus mascotas y, si sobrevivían, ella aderezaría su comida con las crebas (que son los materiales que el mar arroja a la costa).

Tal vez por la proliferación de noticias falsas, humorísticas o no, mucha gente ha empezado a creerse las cosas más estrambóticas. Además, no se paran un momento a pensar o leer bien, simplemente escupen un pensamiento, esperemos que volátil, porque, de no ser así, las comisarías estarían llenas de denunciantes. En Facebook, algunos usuarios han llegado a desear la muerte de la mujer, la han insultado de la peor de las maneras. El motivo es la pura ignorancia, la falta de sentido común y quizá la maldad.

No voy a explicar aquí que los perros y gatos de Camelle no suelen comer bistés fritos, ya les gustaría, porque es más que evidente.

Quizá porque ahora nos comunicamos por redes sociales hemos perdido la inteligencia que supone entender la retranca. Es posible que nos falte relacionarnos con la gente, sobre todo con la de la zona rural, cuya slow forma de vivir permite utilizar la mollera para añadir jocosidad y buen humor a la vida.

Andan por ahí con la intención de marcar a las personas con diversidad funcional oficial que votan por primera vez, no vaya a ser que hayan sido manipulados para optar por determinado partido (supongo que los más preocupados serán los de Ciudadanos). No se molesten, habría que vigilar a demasiada gente.