Una multa y cuatro partidos de suspensión al San Lorenzo

Melissa Rodríguez
melissa rodríguez CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

ANA GARCIA

Las sanciones corresponden a los hechos sucedidos en la 21.ª jornada

24 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Los hechos sucedidos en el último encuentro entre el San Lorenzo y el Sporting Zas, de la Liga da Costa, en As Pedreiras, han tenido consecuencias. El Comité de Competición y Disciplina ha multado al club «por incidentes de público de carácter grave al agredir un aficionado de esa entidad a dos jugadores del equipo contrario». Y advierte, además, de que «en caso de un nuevo incidente de carácter grave, le será clausurado su terreno de juego».

Pero al Comité tampoco le tembló la mano para sancionar al jugador local, Mario Rodríguez: «Cuatro partidos de suspensión por agredir a otro, sin causar lesión, estando el juego detenido o a distancia tal que resulte imposible intervenir en un lance de aquel». Al otro involucrado, al futbolista del Sporting Zas, Rubén Corzón, le han impuesto un choque de suspensión «por producirse de manera violenta con ocasión del juego o como consecuencia directa de algún lance del mismo, sin consecuencias dañosas o lesivas».

La presidenta del San Lorenzo, Dolores Viña, informó ayer que la cantidad a la que asciende la multa es de 121 euros, esto es, la mínima. Manifestó que los hechos sucedieron «moi rápido» e «todos xuntos», sin poder aún saber bien el motivo de la trifulca. Sobre el aficionado protagonista, dijo ser un «asiduo» en las gradas que siempre se comporta «ben». No van a recurrir la multa, ya que la ven «normal» y, por lo tanto, la aceptan como tal.

Otras sanciones

Pero, como ya viene siendo habitual tras cada jornada, hubo más castigos para otros equipos. En Preferente, al encargado del material del Sofán, Marco López, le cayó un duelo de suspensión «por protestar reiterada y/o ostensiblemente al árbitro principal, a los asistentes o al cuarto árbitro, siempre que no constituya falta más grave».

En Primera, hubo sanciones para dos equipos. El entrenador del Baio, Pablo Torreira, cumplirá dos partidos de suspensión por «protestar ostensiblemente al árbitro principal» y «por dirigirse a los árbitros en términos de desconsideración tras ser expulsado». Por su parte, al jugador del Soneira, Adrián Pose, le cayó un choque de suspensión por «producirse de manera violenta con ocasión de juego o como consecuencia directa de algún lance del mismo, sin consecuencias dañosas o lesivas».

Pero donde más sanciones hubo fue en la Liga da Costa. El jugador del Baíñas Luis M. Blanco cumplirá dos encuentros de suspensión por «dirigirse a los árbitros, directivos o autoridades deportivas en términos o con actitudes de menosprecio o de desconsideración, o dirigir amenazas a estos cuando no se revele la intención de llevarlas a cabo, siempre que la acción no constituya falta más grave».

Al futbolista del Muxía, Maikel Mouzo, le cayó un partido de suspensión por «agarrar, empujar o zarandear o producirse, en general, otras actitudes hacia otros que, por solo ser levemente violentas no acrediten ánimo agresivo por parte del agente». Al delegado del equipo, Felipe Vilela, otro «por protestar reiterada y/o ostensiblemente al árbitro principal, a los asistentes o al cuarto árbitro, siempre que no constituya falta más grave».

Por último, tampoco se ha librado el entrenador de Corme, Jose Ángel Pérez: «Un partido de suspensión por dirigirse a los árbitros, directivos o autoridades deportivas en términos o con actitudes de menosprecio o de desconsideración, o dirigir amenazas a estos cuando no se revele la intención de llevarlas a cabo, siempre que la acción no constituya falta más grave».