Cabana rehabilitará las viviendas de los maestros para darles un uso social

Después de que la última casa de los maestros quedase deshabitada -tras la reciente jubilación del docente Miguel Vidarte- el Concello de Cabana planea acogerse a las subvenciones que lanza la Xunta para la rehabilitación de estas viviendas y su posterior uso social.

Estas ayudas, destinadas a concellos de hasta 20.000 habitantes, cubren reformas de hasta 40.000 euros por edificación, según explica el regidor cabanés, José Muíño. En el caso de este municipio, y al tratarse de un total de seis casas, esperan que el proyecto global de rehabilitación no supere «os douscentos e pico mil euros».

Pero uno de los requisitos para poder acceder a esta línea que lanza el Gobierno autonómico es contar con un número de demandantes para cubrir la oferta de vivienda. Por este motivo instan a las familias del municipio que estén interesadas a inscribirse en el Rexistro Único de Demandantes de Vivenda da Comunidade Autónoma de Galicia. El requisito fundamental es que los ingresos de la unidad familiar han de ser inferiores a 2,5 veces el indicador público de renta de efectos múltiples (IPREM), un baremo empleado en España para la concesión de subvenciones.

El alcalde confía en que se consiga un número de demandantes al menos igual al de viviendas ofertadas, ya que en una ocasión, hace años, se lanzó la misma propuesta y un total de 40 familias habían mostrado interés. No se pudo llevar a cabo por aquel entonces, al quedar todavía un docente haciendo uso de una de las casas. Ahora, una vez vacías y con el visto bueno del claustro del CPI As Revoltas, el proyecto coge forma, por fin.

El alcalde, que recuerda que las otras casas ya fueron desafectadas para acoger un albergue juvenil, destaca la «inmellorable» situación de estos edificios: «Baixas da casa e xa metes o neno ao colexio, ou o levas ao médico. Están nun lugar privilexiado».

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