GALERÍA DE EMIGRANTES | Rogelio Mazaeda y su exilio en Cuba

Luis Lamela

CARBALLO

CEDIDA POR LUIS LAMELA

Falleció en la perla de las Antillas en fecha que desconocemos

19 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Cicerón, que dejó Roma por un tiempo, dijo que «el exilio no es una pena, sino un refugio, un medio por el que uno escapa a un castigo». Y el camariñán Rogelio Mazaeda Novais (en la imagen, del archivo de Rafael Lema) entra en esta sección, más que por emigrante, por exiliado: su salida de España fue para escapar de la represión franquista que asesinó a varios de sus amigos, y no para mejorar sus expectativas económicas. Rogelio nació en A Ponte do Porto el 31 de julio de 1907, hijo de José Mazaeda Carril y Soledad Novais, estudiando en el seminario de Santiago pero sin llegar a completar los estudios eclesiásticos, y terminó trabajando de chófer en su localidad de origen. Y fue uno de los primeros que se preocupó por la conservación de la riqueza natural del litoral de su municipio, principalmente en 1931 cuando demandó la protección del cabo Vilán.

En el ámbito político y social ejerció como presidente del Sindicato de Oficios Varios, afecto a la UGT socialista, en A Ponte do Porto, y también fue uno de los representantes del Frente Popular en las elecciones de febrero de 1936. Precisamente, los días precedentes al golpe de Estado que los militares ejecutaron en julio de 1936, Rogelio Mazaeda lideró a los hombres del sindicato de Oficios Varios con el fin de intentar frenar la involución militar, y por ese motivo fue perseguido por las nuevas autoridades franquistas, pero pudo permanecer oculto en unas viviendas de su pueblo durante un largo período de 14 años, contando con muchas complicidades que le protegieron durante todo ese tiempo.

En ese ínterin, Rogelio Mazaeda fue procesado en rebeldía y acusado de rebelión, pero no fue hallado. Y, finalmente, el Tribunal de Responsabilidades Políticas le abrió un expediente en 1940 y el 11 de julio de 1941 fue condenado a 10 años de inhabilitación absoluta, 8 años y un día de destierro a más de 200 kilómetros de Camariñas y al pago de una sanción de 500 pesetas que intentaron cobrar a cuenta de la herencia de sus padres.

Rogelio Mazaeda logró huir a Portugal -al parecer vestido de mujer- exiliándose primero en Chile y más tarde en Cuba, isla en la que ya, anteriormente a julio de 1936, había visitado y en donde residía una de sus hermanas. Y como no fue posible el retorno del exilio, ese lugar oscuro y no deseado donde recalaron muchos de los derrotados de la guerra civil española, falleció en la perla de las Antillas en fecha que desconocemos.