«Nunca aprendín un guión enteiro de Badius»

Marta López CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

LOLITA VAZQUEZ

Personas con historia | Personajes míticos, dice José de Betty, «hai moitos en Baio», y no cree que él todavía tenga ese nivel, «pero niso ando», asevera

12 ene 2019 . Actualizado a las 17:30 h.

Fútbol, gaita, teatro, flauta... José de Bety, al que apodan así por su madre, sacaba tiempo de donde podía para hacer frente a sus numerosas aficiones. Omnipresente en la vida cultural de Baio y siempre subido a las tablas para ponerse en la piel de decenas de personajes, José García Romero (1987) es uno de los «míticos».

Comenzó haciendo baile y flauta al amparo de la asociación cultural Adro, y enseguida Xabier Díaz le puso a dar clase a los más pequeños. «Despois fun deixando cousas, porque non daba. Comecei a carreira e acabei quedándome só con teatro», dice José, que encabezó la segunda generación de actores del grupo Badius. «Medrei vendo a grandes actores como Marco [Álvarez] ou Jorge [Sánchez] e a primeira vez que me vin enriba do escenario con eles... Si que pasei algo de vergoña, pero só as primeiras veces. Nunca tiven medo ou presión de ningún tipo, porque sempre recibín axuda».

Unha de romanos, Tócama Sam, ¡Xoo... Ante o perigo!, Frankenstein, Bancagare... Clásicos de la dramaturgia comarcal aficionada que nunca pasan de moda, y en cada uno de ellos José de Bety jugó un papel esencial: «Os meus personaxes nunca son guapos ou galáns [ríe], sempre jorobados ou borrachos! Ricardo, que fai os guións, xa me ten dito que escribe os personaxes xa pensando en min».

Este año hará 18 años que forma parte del grupo, y después de tantas horas de ensayos se conocen como si fueran de la familia. «Se son sincero, nunca aprendín un guión enteiro de Badius, exceptuando a primeira obra [ríe]. Normalmente facemos moita improvisación, así que o guión é unha suxerencia. Sabemos onde comeza e onde remata a escena, e as catro cousas importantes que hai que dicir, e o resto vai sobre a marcha», explica.

Después de Facer o sueco, en la que hizo un cameo estelar cuando Badius la trajo a Baio -«como unha estrela convidada»-, y Frankenstein, en la que interpretó a Igor, un simpático jorobado, en la actualidad preparan una pieza que les sonará a los seguidores de la comedia española. «Unha serie de persoas que teñen TOC coñécense nunha sala de espera dun médico, e a partir de aí pásanlle unha serie de cousas que xa non podo contar [ríe]». Aunque su inspiración se basa, en realidad, en la obra de teatro argentina original, también tomaron ideas de la película española Toc Toc, estrenada en 2017. Habrá que esperar al año que viene, «se todo vai ben», para verla, pero prometen risas a destajo.

Más joven que sus alumnos

Formado en ingeniería técnica, José tuvo siempre claro que le gustaría dedicarse a la docencia en Formación Profesional. En la actualidad imparte TICS a alumnos de cuarto de la ESO y primero de bachillerato en el IES Lauro Olmo, en O Barco de Valdeorras, y también da clase en FP de electricidad. Le encanta trabajar con adolescentes porque en parte, bromea, le hacen sentir «joven», aunque tampoco tiene problema en dar clase a personas de mayor edad. «Tiven unha aula en Lugo na que todos os meus alumnos eran máis maiores ca min. É das mellores clases que recordo, súper traballadores». Intenta siempre, sobre todo en la asignatura de tecnologías de la información, enseñarles cosas útiles, que sean entretenidas y les sirvan para algo. «Dou as clases un pouco como no teatro, de coña e tratando que non se aburran».

Siempre «argallando» algo

Dice José que todo el mundo, incluido él mismo, «pasou polas mans de miña nai», de Bety, que fue profesora en el colegio de Baio. Él, que confiesa haber sido un niño bastante travieso, tampoco se libraba de los castigos de la profesora, pese a ser su madre. «Ao contrario, os demais aínda ían zafando algo, pero eu non me libraba, porque ao chegar á casa ela vixiaba que cumprira os castigos».

Para aprender a tocar la guitarra echó mano de un compañero, Raúl, que había estudiado en el conservatorio, y juntos versionan y parodian temas populares adaptándoles las letras a situaciones reales que a ellos mismos les han ocurrido. «Quizá non sexan para publicar no periódico», bromea, y añade: «A xente ten que vir a rirse, non a escoitar música, porque ademais canto fatal».