El choque contra el Boiro acabó con empate polémico (2-2)
29 dic 2018 . Actualizado a las 22:42 h.El Bergantiños, de ganar el partido contra el Boiro (2-2), podía convertirse en el campeón de invierno a falta de una jornada para que se termine la primera vuelta. Pero, lo que parecía un caramelo muy dulce por la diferencia de posiciones en la tabla (primero y décimo quinto), acabó convirtiéndose en amargo. El rival fue el encargado de abrir y cerrar el marcador en el segundo período, si bien el último gol en el último suspiro resultó muy polémico. «O árbitro tiña que pitar ou ben fóra de xogo, porque foi moi claro, ou ben falta a favor noso, xa que Óscar agarrou a Caridad e, en cambio, pitou penalti para o Boiro», explicó el delegado del Bergantiños, Mariano Muñiz, sobre la jugada que llevó a ese desafortunado empate.
Fue un duelo sin prácticamente ocasiones, salvo los goles. El 0 a 1, en las botas de Elier en una jugada aislada debido a un error cometido por el Bergan. Rivera firmó tablas tras un penalti pitado sobre Aarón. Más tarde, el pichichi rojillo tomó ventaja para su equipo en el electrónico al rematar, de cabeza, un centro de Cañi. Y ya en el minuto 87, fue cuando Francisco transformó el polémico penalti que le valió a Borja y Christopher para ser expulsados al recibir la segunda tarjeta amarilla por protestar. Marcos Rodríguez, Cano y Rivera también vieron la cartulina. Por parte del Boiro, solo fue amonestado Francisco.
El día 13 de enero, los de Miguel Figueira están obligados a ganar al Alondras para seguir líderes, pues el Racing Ferrol los persigue a tan solo un punto de diferencia.