16 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.
Una sociedad es fuerte cuando es capaz de corregir sus puntos flacos. Carballo tiene una tarea: salvar a los jóvenes presentes y futuros del mundo marginal. Que una veintena de mozos conocidos por sus disputas varias con las fuerzas seguridad pasen la Navidad en prisión puede pensarse que es un alivio para sus supuestas víctimas, pero es una derrota como sociedad en conjunto. Es una muestra de que queda mucho que hacer.